La explotación y exploración minera habría dejado rezagos nefastos para los recursos hídricos y para los páramos de Tasco, Boyacá. Así lo afirman los Campesinos y ambientalistas que se han enfrentado desde hace más de un año, con protestas simbólicas, a las multinacionales interesadas en sacar carbón y/o hierro en Tasco, Boyacá.
Fuente: Radio Caracol
Sixto Amaya, líder de la zona, dijo en Caracol Radio que “en la vereda El Pedregal, sector El Banco, en el páramo de Pisba, completamos un año de protestas por la explotación minera a cielo abierto, de un bloque de hierro por parte de Acerías Paz de rio de Votorantim”.
Explicó que “hace unos 25 años hubo una explotación en esta zona por parte de la esa multinacional; dejaron un tiempo y hace 13 volvieron a explotar, y ahí nos dimos cuenta que perdimos entre 28 y 32 nacimientos de agua en la región, de la provincia de Valderrama. Por eso no podemos dejar acabar alrededor de 25 nacimientos de agua que todavía nos quedan”.
Aclaró que “no estamos en contra de la minería sino en contra de que se acaben nuestros recursos hídricos, porque no queremos que en el futuro no haya agua para vivir”.
En el páramo de Pisba nace el agua para Socotá, Tasco, y varios ríos y quebradas que llegan hasta Casanare, alimentando acueductos para cientos de comunidades.
Los campesinos se opondrán a cualquier tipo de explotación a cielo abierto de mineral de hierro, de la mina el Banco, ubicada en la vereda “El Pedregal”, hasta que tengan certezas de que gobierno departamental y nacional les asegure políticas de protección a los recursos naturales de la zona.
“Hasta que no se haga un acta entre todas las autoridades que correspondan y la comunidad, donde se asegure que no entrarán a explotar, donde desistan de ese proyecto, hasta entonces seguiremos en el plantón, y estamos preparados y dispuestos a hacerlo el tiempo que sea necesario. No queremos ver nuestras generaciones muriéndose de sed”, concluyó el líder de la región.