Las cuentas no dan. El gobierno de Juan Manuel Santos ha vendido a la opinión pública nacional e internacional que uno de los polos económicos de desarrollo del país es la MINERIA. En su plan de desarrollo, la minería es una de las “locomotoras”; sobre esa base el país le da en concesión a las multinacionales para que exploren, y si encuentran minerales o hidrocarburos los extraigan y se los lleven en su totalidad sin dejarle ganancias a la nación acorde con la riqueza que hay en el subsuelo. El PIB minero representa, del PIB total, solamente el 2,3% y el 7.7% teniendo en cuenta los hidrocarburos.

Fuente: Agencia de Noticas Nueva Colombia

Cabe preguntar: ¿y por el 7.7% del producto interno bruto del país le entregamos el 49% de nuestro territorio para que las multinacionales horaden la tierra, desaparezcan colinas, desvíen ríos y acaben con el medio ambiente?

En el 2012 la minería le aportó al PIB total 36.112 miles de millones de pesos.[i]

O las cifras están mal o las multinacionales le esconden al Estado lo que verdaderamente extraen de: Oro, Plata, Platino, Coltán, Carbón, Petróleo y Esmeraldas entre otros.

Según un artículo editado en el periódico El Tiempo, que cita como fuente el estudio de la Contraloría con el título “Minería en Colombia” del año 2013, en cinco años las empresas mineras pagaron como promedio 878 mil millones de pesos anuales por concepto del impuesto a la renta, mientras que tuvieron deducciones, descuentos y exenciones que representaron un gasto tributario para el físco de 1,78 billones de pesos. Más adelante se explica que “por cada 100 pesos efectivamente pagado por este concepto, las empresas mineras tuvieron descuentos que terminaron representando pérdidas para el Estado de más de 200 pesos”.

En síntesis se puede afirmar que, en términos generales, la minería no solamente no produce ganancias al estado colombiano, sino que además genera pérdidas.[ii]

Tradicionalmente Colombia ha sido un país con vocación agrícola. En 1990 este sector representaba el 16,7 % del PIB total y la fuerza de trabajo empleada era el 26 % del total nacional. Haciendo una comparación con el año 2013, resulta evidente que la caída de producción ha sido vertical y el porcentaje del PIB agrícola se ha reducido en un 6,1% con respecto al PIB total. Los trabajadores ahora empleados son el 16,9% del total.[iii] La Agricultura, Ganadería, Caza, Pesca y Silvicultura generaron 29.114 miles de millones de pesos. [iv]

La mano de obra empleada en el sector minero, incluido hidrocarburos, genera el 0,96% del total, con 202 mil personas.[v] Si se calcula el empleo directo en la gran minería, serían unos 15.000 trabajadores sobre un total aproximado de 21,5 millones de personas empleadas en todos los demás sectores.[vi]

La agricultura ha sido deprimida por los TLC, que ha sumido a los agricultores en una crisis muy profunda generando movilizaciones, paros y huelgas que todavía no se han resuelto. Las importaciones de alimentos se han multiplicado, llegando a diez millones de toneladas. Estas llevaron a una quiebra total a los productores campesinos. Según una encuesta del Dane publicada en junio el año 2015, el 27% de los víveres consumidos en Colombia son foráneos.[vii]

Se puede concluir que si se desarrolla la agricultura, la ganadería, la pesca y la silvicultura no se necesitarían importar tantos alimentos y al mismo tiempo no se entregaría el país a las multinacionales para que acaben con el medio ambiente.

La minería no genera encadenamiento productivo, la tecnología que se usa es muy avanzada, y esta impide que se ocupe mano de obra en la producción. Si no hay trabajadores que consuman, no se desarrollan otras ramas de la economía como las confecciones, la textil, los restaurantes, cafeterías, las bebidas, autopartes, venta de carros y otros.

La agricultura ocupa mano de obra y genera encadenamiento productivo en otros sectores económicos, desarrollando el comercio, transporte, manufacturas y pequeñas industrias. Por lo tanto, si la producción de alimento aumentara solamente un 2% del PIB total, se crearía también un mercado interno que generaría un crecimiento económico superior al PIB minero (sin hidrocarburo).

La agricultura no deteriora el medio ambiente, todo lo contrario, se conserva el agua, el aire, la tierra, ayudando a conservar el planeta. En cambio la minería acaba con todo, la tierra queda desértica, los químicos envenenan el agua y el aire; el ser humano contrae enfermedades crónicas de las vías respiratorias, el sistema digestivo, el sistema nervioso llegando a producir la muerte.

Por lo anterior es más rentable para el pueblo colombiano una política hacia el desarrollo en el sector rural que seguir entregando nuestro territorio a las multinacionales para que extraigan los minerales que les generan ganancias millonarias y ningún beneficio para los colombianos.

[i] “Anuario Estadístico Minero 2007-2012”, MINISTERIO DE MINAS Y ENERGÍA, Bogotá 2013.

[ii] “Mineras pagan bajos impuestos y reciben millonarios beneficios”, 6 de mayo de 2013, www.eltiempo.co

[iii] “REVISIÓN DE LA OCDE DE LAS POLÍTICAS AGRÍCOLAS: COLOMBIA 2015” OECD 2015.

[iv] “Anuario Estadístico Minero 2007-2012”, MINISTERIO DE MINAS Y ENERGÍA, Bogotá 2013.

[v] “INDICADORES DE LA MINERÍA EN COLOMBIA”, Unidad de Planeación Minero Energética, Bogotá 2014.

[vi] “LA RENTA MINERA Y EL PLAN DE DESARROLLO 2010 – 2014” Camilo González Posso, Bogotá D.C. Febrero de 2011, página 32.

[vii] “27% de víveres consumidos son foráneos Colombia come cada vez más alimentos importados”,23 de Junio 2015, ELESPECTADOR.COM