Lo que en principio fue tomado por las empresas mineras y gobiernos provinciales argentinos como un acto declamativo de la CEE, resultó un hecho concreto, serio y de aplicación práctica. El Parlamento Europeo pide la restricción del comercio con aquellos países que en la explotación minera usen cianuro. Los países del MERCOSUR lo usan y hoy ven peligrar sus negocios por la decisión europea que va acondicionar sus exportaciones y atacan en bloque. El eje político-comercial del Cono Sur articula con el sector minero.

Fuente: La Radio del Sur y Agencia OPI Santa Cruz
16/06/2010. Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Brasil y Ecuador sostuvieron en una declaración que “la minería constituye una actividad fundamental de desarrollo” para sus pueblos y actividades productivas. El rechazo apunta a una resolución aprobada en mayo pasado por el Parlamento Europeo en la que pide una prohibición total del uso de cianuro en la minería europea con el objetivo de proteger los recursos hídricos y la biodiversidad.

Los gobiernos de Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay y Ecuador, con la adhesión de Brasil, firmaron en Buenos Aires la Declaración Minera del Mercosur, que rechaza las restricciones comerciales e industriales impulsadas por la Unión Europea a actividades productivas como la minería.

La declaración fue firmada durante una reunión del Subgrupo de Trabajo 15 Minería del Mercosur, en la que participaron autoridades de Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay y Ecuador.

Los países de la región rechazaron las recientes normativas impulsadas por el Parlamento Europeo, que proponen trabas a la industrialización y comercialización de productos de sectores productivos como el minero, indicó un comunicado de la Secretaría de Minería argentina.

Tales medidas fueron consideradas restrictivas y perjudiciales para “el desarrollo de nuestras actividades productivas y consecuentemente el desarrollo de nuestros pueblos”.

El rechazo apunta a una resolución aprobada en mayo pasado por el Parlamento Europeo en la que pide una prohibición total del uso de cianuro en la minería europea antes del fin de 2011 con el objetivo de proteger los recursos hídricos y la biodiversidad.

El texto parlamentario reclama a la Comisión Europea (CE) que proponga esa medida y elimine cualquier apoyo directo o indirecto a proyectos mineros que supongan el uso de cianuro.

“Ante las recientes normativas impulsadas por el Parlamento de la Comunidad Europea, que proponen trabas a la industrialización y comercialización de productos de sectores productivos como la minería de nuestro continente, los países de la región rechazaron las medidas por considerarlas restrictivas y perjudiciales para el desarrollo de nuestras actividades productivas”, señala la declaración del Mercosur.

Los países suramericanos sostuvieron que “la minería constituye una actividad fundamental de desarrollo” para sus pueblos.

Asimismo, aseguraron que “existen todas las garantías para el desarrollo del sector minero en armonía con el medio ambiente y las comunidades, ya que son de aplicación modernas tecnologías que responden al cumplimiento de las más estrictas normas ambientales aplicables en el orden internacional”.

El secretario de Minería argentino, Jorge Mayoral, quien presidió la reunión de Buenos Aires, explicó hoy a Efe que la medida impulsada por el Parlamento europeo atenta “contra el normal desarrollo de procesos dentro de la minería”.

La resolución parlamentaria, según indicó el funcionario, pide, entre otras cosas, que no se respalden proyectos mineros en terceros países que utilicen cianuro.

“No compartimos una ambición de esta naturaleza que pretenda legislar sobre nuestras propias autonomías. Este tipo de resoluciones atentan contra la autarquía de nuestros países y, al mismo tiempo, son verdaderas barreras para comerciar”, señaló Mayoral.

El funcionario señaló que, en la práctica, la medida implicaría la imposibilidad de exportar y procesar en la UE determinados minerales extraídos en Suramérica.

“Invitamos a los miembros de la UE a que conozcan la forma en que llevamos adelante la minería, en cumplimiento con los estándares de calidad más exigentes que el mundo conoce”, aseguró Mayoral.

El funcionario se quejó de que ahora Europa legisle “extemporáneamente” sobre “recursos que ya no tiene”.

“La faena que tuvieron que realizar para extraer mucho de su mineral ya la hicieron y ahora no tienen recursos. Por lo tanto, no creemos que sea razonable llevar adelante este tipo de resoluciones”, añadió el funcionario argentino.

Mayoral recordó que los países firmantes de la declaración representan más de un tercio de la producción mundial de los metales de mayor consumo global.


El fondo de la reacción de MERCOSUR en sintonía minera

Lo que en principio fue tomado por las empresas mineras y gobiernos provinciales argentinos como un acto declamativo de la CEE, resultó un hecho concreto, serio y de aplicación práctica. El Parlamento Europeo pide la restricción del comercio con aquellos países que en la explotación minera usen cianuro. Los países del MERCOSUR lo usan y hoy ven peligrar sus negocios por la decisión europea que va acondicionar sus exportaciones y atacan en bloque. La falta de reconversión tecnológica de las mineras en América Latina (y ni hablar en Santa Cruz) amenaza con hacerles pagar su precio.

El 12 de mayo de este año publicamos una nota donde señalábamos que el Parlamento Europeo había decidido prohibir la utilización del cianuro en la explotación minera y transcribimos la Resolución que algunos operadores de empresas mineras de esta provincia y el propio gobierno provincial minimizaron o trataron de desconocer en su valor fundamental: la seriedad con que los europeos se toman estas decisiones de carácter corporativo.

Pero las empresas mineras en nuestro país y en los países del MERCOSUR no estaban tan tranquilas de la puerta para adentro y aún sosteniendo el doble discurso ante la opinión pública o realizando declaraciones a través de algún Ejecutivo, donde se minimizaban los alcances de esta medida, señalando inclusive que “no era una prohibición”, sino una “solicitud de prohibición” y observando como improbables los efectos inmediatos de la decisión de la CEE en esta parte del mundo, comenzaron a preocuparse por lo que no hicieron en todos estos últimos años: acompañar el desarrollo minero con nuevas tecnologías y de esa manera prepararse para competir en un mundo que está sufriendo seriamente los riesgos de la irresponsabilidad humana en el manejo de sustancias y elementos altamente nocivos para el hombre y el medio ambiente. Europa que ya ha pasado por todos los estadíos de esta degradación, reacciona para detener el caos. En nuestro país, todavía dudamos.

Por este motivo en una reciente reunión realizada en Buenos Aires, los países de la región decidieron rechazar en conjunto las normativas impulsadas por el Parlamento Europeo que pone trabas a la industrialización y comercialización proveniente de sectores productivos como el minero que utilicen cianuro en la actividad extractiva.

El Parlamente Europeo (que algunos en nuestra provincia creen que son burócratas decrépitos sin ejecutividad) pidió la prohibición total del cianuro en la minería europea antes del fin del 2011 y le reclama a la Comisión Europea (CE) que elimine cualquier apoyo directo o indirecto a proyectos mineros que supongan la utilización del cianuro.

La palabrita fatal

En un curioso parte de prensa difundido hoy por AIMSA, la agencia de prensa que sostienen las mineras, se remarca la decisión de los países del Mercosur de rechazar la medida, pero curiosamente en todo el texto del parte, se omite deliberadamente mencionar al cianuro.

Expresan: “El documento también contó con la adhesión del gobierno de Brasil. La declaración afirma que, ante las recientes normativas impulsadas por el Parlamento de la Comunidad Europea, que proponen trabas a la industrialización y comercialización de productos de sectores productivos como la minería de nuestro continente, los países de la región rechazan las medidas, por considerarlas restrictivas y perjudiciales para “el desarrollo de nuestras actividades productivas y consecuentemente el desarrollo de nuestros pueblos”.

La omisión en este texto del parte de prensa es obvio, lo que debiera decir ese párrafo es: “… ante las recientes normativas impulsadas por el Parlamento de la Comunidad Europea, que proponen trabas a la industrialización y comercialización de productos de sectores productivos como la minería de nuestro continente que utilicen cianuro en el proceso, los países de la región …. etcétera”

Así como está presentada la noticia por la Agencia de información de las mineras, los europeos aparecen como saboteadores de la industria y el comercio de esta parte del mundo, ahora, si completamos la información y explicamos que realmente se refieren a la industria minera que utiliza cianuro en los procesos de lixiviación, la cosa cambia y la interpretación es otra.

Más adelante el documento remarca “…existen todas las garantías para el desarrollo del sector minero en armonía con el medio ambiente y las comunidades, ya que son de aplicación modernas tecnologías que responden al cumplimiento de las más estrictas normas ambientales aplicables en el orden internacional”.

Aquí nuevamente se incluye un párrafo donde se cuida sobremanera no mencionar la palabra “cianuro” y precisamente lo que está poniendo en tela de juicio el Parlamento Europeo son las técnicas de lixiviación con compuestos cianurados que son nocivas para el medioambiente y altamente tóxicos para el ser humano.

Es decir, que AIMSA, respondiendo a los lineamientos de las empresas mineras de Santa Cruz, emitió un parte de prensa falaz, incompleto, donde se omite una cuestión tan fundamental como indicar cuál es el objeto que genera la prohibición para comercializar productos con la CEE e incurre, una vez más, en el engaño y la parcialización del mensaje; o bien el documento emitido en este Congreso en Buenos Aires es tendencioso y en tren de victimizar la actividad, deja afuera el nudo del problema: la utilización del cianuro que hoy es rechazado por el primer mundo, pero sigue siendo la materia prima fundamental para el laboreo minero en Sudamérica, en la Argentina y puntualmente en Santa Cruz donde los legisladores debieran promover la prohibición de su uso pero miran para otro lado.

Debemos señalar que la situación de Santa Cruz y los sucesivos problemas que se ventilan a través de nuestro portal sobre la actividad minera en la provincia, es monitoreada por algunas ONG de España, que nos han hecho llegar sus inquietudes sobre el cuidado del medioambiente en la Patagonia y nos han requerido algunos datos sobre Santa Cruz puntualmente, en lo que es para ellos una desprotección legal de los pueblos frente a las corporaciones mineras que actúan con bajísimos estándares en esta parte del mundo.