Pobladores de Cananea reportan afectaciones por la llegada de nubes de polvo que se levantan del represo de jales de la mina de cobre de Grupo México Los jales son los restos de sustancias químicas usadas en los procesos de separación del cobre mezcladas con grandes volúmenes de agua, pero debido a la huelga iniciada el 30 de julio de 2007 bajó su nivel casi por completo hace cuatro meses. “Estos químicos están en el aire, además los niños y los viejitos se enferman mucho”.

Planta de procesamiento de cobre en Cananea Fuente: diario La Jornada
Cananea, Sonora, México – 25/04/09. Los jales son los restos de sustancias químicas usadas en los procesos de separación del cobre, los cuales eran controlados mediante grandes cantidades de agua en un contenedor de la empresa, pero debido a la huelga iniciada el 30 de julio de 2007 bajó su nivel casi por completo hace cuatro meses.

Los jales son los restos de sustancias químicas usadas en los procesos de separación del cobre, los cuales eran controlados mediante grandes cantidades de agua en un contenedor de la empresa, pero debido a la huelga iniciada el 30 de julio de 2007 bajó su nivel casi por completo hace cuatro meses.

Estas nubes “causan muchos estragos en la gente. Las enfermedades que generan van desde alergias hasta infecciones respiratorias. Algunos chavalos han tenido que ser llevados a Hermosillo, pues les salen ronchas; creemos que por estos químicos que están en el aire, además los niños y los viejitos se enferman mucho”, dijo Fernando Camargo, un minero que hacía guardia en la puerta de acceso número uno del socavón, mientras a lo lejos se veía el polvo volcando hacia la periferia.

Señaló que los jales contienen ácidos sulfúricos y otras sustancias que los mineros consideran altamente cancerígenas y se han transformado en un problema serio pues los fuertes vientos, que prácticamente azotan cada dos días, los esparcen incluso a poblaciones vecinas del otro lado de la frontera.

Los químicos llegan a agostadero donde pasta el ganado y caen sobre el ojo de agua, a ocho kilómetros de la ciudad minera, donde nace el río Sonora que atraviesa varios municipios de la entidad, de norte a sur.

Los mineros del sindicato estamos dispuestos a ayudar para encontrar una solución a este problema, que es responsabilidad de la empresa (Grupo México), a la que, sin embargo, poco le importa la salud del pueblo: ellos nomás quieren saquear la riqueza de estos cerros, expuso Fernando Camargo.

Se sabe, dijo, que en otras minas han vertido toneladas de tierra encima de los represos secos y con eso se limita el daño al ambiente.

El miércoles pasado, durante la visita de Andrés Manuel López Obrador, Sergio Tolano Lizárraga, dirigente de la sección 65 del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana, dijo: Por donde quiera que vamos pasando la contaminación brota por toda la ciudad, pero aun así los trabajadores no nos rendimos y estamos en huelga porque queremos proteger a nuestra comunidad.

El sábado anterior, directivos de Grupo México reconocieron que es un tema que les preocupa, pero dijeron estar con las manos atadas en tanto no se levante la huelga, aunque los mineros aseguran que no es necesario esperar a que eso suceda para atacar urgentemente el problema del daño ecológico a la región.

Ayer, el alcalde del municipio vecino de Bacoachi, el panista Miguel Avechuco Pesqueira, señaló que los habitantes que cruzan a Cananea deben extremar precauciones al conducir por la carretera Cananea-Bacoachi, ya que la visibilidad se ve seriamente afectada por el polvo.

En los días en que más polvo se levanta no se puede ver nada, hay que prender las luces de los automóviles y bajar la velocidad, expuso.