Crónica del 1ª Foro de Actividades Productivas a Escala Humana y para Beneficio de las Comunidades que se concretó desde el 22 al 24 de junio de 2012 en Esquel. Publicamos con mucho atraso este excelente artículo y el reconocimiento a su autor, Gustavo Tunesi.

Por Gustavo Tunesi publicado en Prensa del Pueblo

Se realizó en instalaciones del Colegio Salesiano de Esquel, el 1ª Foro de Actividades Productivas a Escala Humana y para beneficio de las comunidades, organizado por la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de la ciudad de Esquel por el No a la mina, Asamblea Comarcal contra el saqueo y la contaminación, ENDEPA Chubut, Foro Ambiental y Social de la Patagonia y Asociación Kalewche.

El encuentro consistió en exposiciones de disertantes locales, regionales y de diversas provincias argentinas y de Uruguay, sobre producción ambientalmente sustentable a pequeña y mediana escala, experiencias de comercialización, políticas públicas aplicadas y, sobre el cierre del encuentro, la celebración de una Asamblea de Vecinos enfocada en la propuesta de proyectos de desarrollo económico y discusión de alternativas al modelo de explotación minera auspiciado por el Gobierno Provincial y Nacional, enmarcado en la permanente lucha por la preservación del medio ambiente, los recursos naturales y la búsqueda de un genuino desarrollo.

Huertas, senderismo, artesanía

En primera instancia expuso Rubén Astorquizaga, sobre su experiencia como productor hortícola de la zona de Paso del Sapo, señalando las potencialidades del sector en la región y recalcando a la audiencia que la gran mayoría de los vegetales comercializados en el oeste de nuestra provincia, provienen de la región de Cuyo y el valle del Río Negro. Su tarea de años como trabajador de suelo fértil, le han permitido arribar a datos tales como que con nueve hectáreas existe posibilidad de sembrar nueve cultivos distintos (ajos, cebollas, acelgas, espinacas, lechugas, tomates, etc.), se ocuparían alrededor de 749 jornadas de trabajo, lo que equivaldría a prácticamente un año de empleo para dos personas, considerando los ciclos del producto. Concluye sobre la falta de apoyo, imaginación e iniciativa por parte del Estado, para incentivar este tipo de producción.

Luego se presentaron Estefanía Cheregüini y Walter Oszust, de Esquel, quienes llevan adelante el Proyecto Huella Andina. El mismo crea un sendero que une el lago Aluminé (Neuquén) con el lago Baguilt (Chubut). Se encuentra en etapa de desarrollo, habiendo comenzado el mismo en el año 2009 en Villa Futalaufquen. Los expositores destacan las diferencias de paisajes entre el norte y el sur del sendero, las araucarias y las piedras volcánicas en cantidad arriba, la diversidad y maravilla paisajística abajo. El recorrido cuenta 31 etapas, que equivaldrían a 31 días de caminata, habiéndose implementado refugios para dormir en la noche, o zonas bigbag donde poder armar una carpa y levantar todo al otro día. Esta actividad ofrece posibilidades de generación genuina de trabajo relacionado con el turismo, tales como alojamientos que ofrecen los vecinos al sendero, guiadas, porteadas (llevar carga), acompañamiento ilustrado, comidas, etc. Nos hablan de 60 mil kilómetros desarrollados de sendero en España, zona de auge de la actividad. En toda Europa existirían 900 mil km. de senderos certificados, esto es, realizados de tal forma que el caminante no se pierda.

Más adelante, y el mismo día viernes, se presentó Luis Couceiro, lapidador, habitante del pueblo de Tecka. Nos instruyó sobre la cantidad existente de material mineral diseminado sobre la superficie de la provincia, o en zonas de canteras sobre relieve, apto para su aprovechamiento en la construcción de viviendas u obras, o su refinamiento para la confección de alhajas, adornos, utensilios y demás.
Por su relato, provocó en la audiencia la sensación de que la riqueza está a la vista de todos, que la naturaleza se ofrece bondadosa al andar de nuestros pasos, sólo nos falta percibirlo. El artesano destaca la deficiencia existente en cadenas de comercialización que atenta contra el desarrollo de esta creativa actividad. La exhibición de trabajos realizada no hizo más que sorprendernos por su sencillez y belleza, de un pulido impecable.

Emprendimientos productivos en Esquel y los vinos de El Hoyo

Recreo de por medio, se presentó Damián Villanueva, funcionario municipal, del Área de Producción y Dirección de Empleo. Nos contó sobre la existencia del CAPEC (Centro de Apoyo a la Producción de Esquel y la Comuna), y nos habló sobre los proyectos del área bajo su gestión, tales como la sala comunitaria de productores de miel (ya concretada), la fábrica de adoquines, la construcción de una sala comunitaria de dulces y licores, carpintería industrial, invernáculos, etc. Recalcando que se está poniendo empeño en la concreción de un centro de acopio de fruta fina, esto es, cámaras y túneles de frío, nos señaló la existencia del ADRE (Agencia de Desarrollo Regional Esquel) que tiene como objeto motorizar proyectos productivos de desarrollo regional. Esta presentación contó como epílogo un debate sobre la efectividad de estas áreas de apoyo en los últimos años, a falta de un plan de desarrollo y estímulo gubernamental definitivo que aliente el crecimiento de la pequeña y mediana producción.

Por último, el viernes se presentó Darío Gonzalez, de El Hoyo, enólogo e ingeniero agrónomo. Nos explicó que las posibilidades vitivinícolas en la zona son ciertas y particulares. De su experiencia como productor en Mendoza, cuenta que con 5 hectáreas se puede lograr una producción atractiva, definir sus propias ventas e incluso exportar.

Darío es productor mendocino, dueño actualmente de un viñedo que exporta mosto concentrado. Se encuentra en Esquel estudiando la posibilidad de desarrollar emprendimientos de este tipo en la zona de Nant y Fall, y otro en Gualjaina. Su idea es producir en la zona y utilizar las vías de comercialización abiertas por los productores mendocinos hacia el exterior, desarrollando modelos de bodegas boutique, siendo áquellas con una extensión de cinco a veinticinco hectáreas, entusiasmándose con el potencial productor de la zona. Luego nos comentó sobre el alto valor económico de la tierra en la región, que están caras a pesar de no estar trabajadas, y reclamó la necesidad de una política pública de incentivo hacia este tipo de producción que es demandante de mano de obra y sustentable en el tiempo. Nos señaló que un desarrollo minero atentaría contra este tipo de producción por la competencia hacia el recurso agua, señalando también que es baja tanto en la cordillera como en la meseta la capacidad de alimentación eléctrica.

Frente a la desocupación, organización. Cooperativa La Juanita y FaSinPat

Ya en el día sábado vivenciamos uno de los momentos más emotivos de las jornadas con la exposición hecha por Silvia Flores y Angel Hamed, de La Matanza, provincia de Buenos Aires, integrantes de la Cooperativa La Juanita Ltda, proveedora de servicios, educativa y comunitaria. Esta organización se inició como un movimiento de desocupados y piqueteros en pleno partido de La Matanza, “cueva de la corrupción”, según ellos, en búsqueda de soluciones laborales para paliar la grave crisis en los años 2000 y 2001. En sus orígenes se conformaron en un local dedicándose a la panadería, con un perfil comunitario, y con el entendimiento de que debían cumplir una función social, que era sostener el precio del pan. Se vendía el kilo de pan a 1 peso, siendo en el resto del barrio su precio el de 3.50 pesos. Desde un principio el grupo comenzó a funcionar como un proyecto productivo y educativo. Recibieron apoyo de la Asamblea de Palermo Viejo y de la conocida conductora Maru Botana, quien les enseñó técnicas de marketing y comercialización. Así lograban vender panificados a un precio mucho mayor en Capital Federal, subsidiando así el precio del barrio de La Matanza. Lograron un pan dulce muy exitoso, y llevan vendidos más de 60 milkilogramos.

La Cooperativa logró abrir una escuela que es orgullo en La Matanza. Los expositores comentaron al pasar que la misma fue construida con un presupuesto de $ 2.400.000, siendo los presupuestos de obras similares en el municipio de U$S 3.000.000. Se logró la construcción de dos cajeros automáticos. Se abrieron cursos educativos en oficios tales como reciclaje de computadoras (de dos o tres máquinas viejas, se rescata una útil), con 800 egresados actualmente, lo que resultó ser una medida altamente ecológica que redujo los residuos informáticos, que asiduamente iban a parar al cinturón ecológico CEAMSE. También se enseña inglés, apoyo escolar, confección de vestidos, restauración de muebles, arreglo de lavarropas; se han construido tachos para la reclasificación de la basura (beneficiando así a los cartoneros). Silvia, muchacha muy conversadora y con una franca forma de transmitir sus sentimientos, opinó que en el país hay que auspiciar una distribución de oportunidades más que una distribución de riqueza.

Minutos luego, y aún conmovidos por la exposición de La Juanita, fue el turno de los ex-empleados de la fábrica de cerámicos Zanon, de la ciudad de Neuquén, quienes nos vinieron a contar su historia de recuperación de su fuente de empleo, al decidirse el cierre de dicha fábrica y el despido de más de 500 empleados por parte de la patronal.

Tras momentos duros se decidió en asamblea la toma de la Fábrica con el fin de preservar la fuente de trabajo. Se arrancó de cero, sin experiencia en la fase empresarial, convencidos de su perseverancia y necesidad, y acompañados por sus mujeres y familia. En un principio se salía a vender cerámicos prácticamente al hombro, o con mochilas, para pasar luego a vender de 12 a 15 mil metros de cerámicos.

Cuando la fabrica fue levantando cabeza, renaciendo de las cenizas, el supermercado mayorista Easy les ofertó comprarles toda la producción, oferta a la que se negaron, con valentía y visión de futuro, valorando la independencia y adivinando el riesgo a la seguridad y la dominación. Hoy en día se enorgullecen de aquella decisión. En momentos de crisis, donde las deudas arreciaban, recibieron la inapreciable ayuda de la comunidad mapuche de Zapala que, dueña de una cantera de arcilla (insumo fundamental para la fabricación de cerámicos), les donó el material a la naciente cooperativa. Hoy en día hay una gran mancomunión entre la comunidad mapuche de Zapala y los miembros de FASINPAT (Fabrica Sin Patrón).

Esta organización cuenta con un sistema jerárquico que respetan en pos de una administración eficiente, una vez por mes la Asamblea General es la que decide la política general, y da los lineamientos a los gerentes (socios cooperativos). Durante el mes la pirámide se invierte y son los propios gerentes los encargados de hacer cumplir las órdenes a los propios integrantes de la Asamblea (trabajadores). Se rotan los cargos para evitar la corrupción. Los miembros de esta cooperativa nos transmitieron así su experiencia, su historia y actualidad, y nos ilustraron sobre las virtudes y también los problemas del cooperativismo, señalándonos consignas tales como que la solidaridad no se agradece, se participa.

Cultivar en Santiago, reciclar en Rafaela, asociarse en la Línea Sur

Ya sobre el mediodía del sábado se presentó el licenciado en relaciones internacionales Pablo Rico, de La Banda, Santiago del Estero, representante de la Cooperativa de Alcaparras Argentinas Ltda. Comenzó su alocución con su frase “Alcaparras, una esperanza para la tierra”, contándonos que es hijo de madre y padre pediatras, quienes optaron por trabajar la tierra para cosechar sus frutos y encontraron en las alcaparras, en una zona árida y seca de Santiago del Estero, un cultivo próspero. De semillas traídas de Italia, hoy en día producen en dos provincias mediante la cooperativa que conformaron con otros productores de la región, y elaboran tanto para la industria gastronómica como para el sector de cosméticos.
De la flor nace un fruto, el alcaparrón, que también se cosecha. Se la reconoce como planta del desierto, ya que es muy resistente, llegando sus raíces a medir 16 metros.

La producción pasó de ser de un tamaño familiar a exportarse en distintos mercados del mundo, y a la elaboración de sus propias semillas en un laboratorio de micropropagación. La actividad no tiene uso intensivo de maquinarias, por lo que es generadora de mano de obra en cantidad. En la actualidad, unos 80 productores se encuentran asociados a la Cooperativa en las provincias de Santiago del Estero y La Rioja, extrayendo de la aparentemente agreste y seca geografía y suelo del lugar, frutos nobles que brindan alimento a lejanos consumidores, y trabajo a pobladores locales.

Más tarde, se presentó Sandra Peralta, de la localidad de Rafaela, Santa Fe. Su exposición trataba sobre la gestión y transformación de residuos urbanos y agroquímicos, reciclaje e implementación de energías alternativas. Esta comunidad, implementando la costumbre de separar la basura en recuperable y no recuperable, le agrega valor a la misma, utilizándola para rellenos sanitarios y otros usos útiles.

A continuación, se expuso sobre la experiencia del Mercado de la Estepa, comercialización de productos de acuerdo a los principios de la economía social y el comercio justo, por Roberto Killmeate, de Bariloche. Se recalca el valor de la Asociación para la venta de los productos de la región, obteniendo el manejo de la comercialización por parte de los pequeños productores asociados (Asociación Surcos Patagónicos). Dentro del mercado de la estepa, sobre la ruta 23 desde Bariloche, aúnan sus esfuerzos unos 300 productores, que mediante un reglamento interno, ellos mismos mantienen el edificio y lo atienden consensuando turnos para así poder vender los artículos de todos en conjunto. Sin dudas un ejemplo que recalca que la Economía Solidaria es una realidad que debemos difundir.

Junto a Killmate expusieron la uruguaya Isabel Andrioni, de Montevideo, sobre soberanía alimentaria, llegando a la conclusión ella que la misma tiene que ver con la autodeterminación de los pueblos; y por su lado Luis Caballero, quien puso énfasis en el estado de la economía actual a nivel regional, nacional y mundial, en cuanto a los inconvenientes a enfrentar, expresando la importancia de mantener vínculos entre las asambleas de los distintos puntos del país.

Guanacos, choiques y hongos

Momentos después, luego de disfrutar de la exposición de artesanos y productores en el hall del colegio salesiano, continuaron las exposiciones de actividades económicas regionales, siendo el turno de Julieta Von Thungen, dedicada a la explotación del guanaco patagónico, y de Daniel Sarasqueta, sobre la utilización económica del choique patagónico. Ellos hablaron sobre la población actual de ambas especies y la posibilidad de trabajar las mismas para aprovechar la excelente fibra y sabrosa carne de los guanacos, así como también la utilización del cuero y las plumas del choique y el consumo de su carne. Nos decían que el principal problema que enfrentan es la falta de popularidad en su consumo, como la inexistencia de plantas faenadoras, y la falta de estabilidad jurídica para insertar la actividad. Nos contaron que el Perú es el principal país exportador de carne de guanaco, siendo el principal comprador Italia. Ambos productores señalaron que sin políticas de incentivo por parte del Estado es muy difícil crear un mercado próspero.

Por último fue el turno de Mercedes Rozas, de la Cámara de Productores de Hongos de Neuquén. Nos contó que un grupo de productores de hongos, conjuntamente con la Universidad del Comahue, y mediante un aporte inicial del Ministerio de la Producción, se fue desarrollando este cultivo en la zona, logrando en la actualidad una importante producción de este alimento. Lleva 20 años de trabajo en el cultivo de hongos, actividad que tuvo un importante aporte de la tecnología. El hongo en Neuquén se produce a partir de la forestación de álamos, luego su corte en troncos, y la colocación de semillas en los mismos. Un tronco generalmente se utiliza durante tres años, ofreciendo un kilo de hongos por año, luego es utilizado como leña. Con la disponibilidad de una hectárea, se puede disponer 35 mil troncos, logrando cosechar así 35 mil kilogramos de hongos por año. Es una actividad de uso intensivo de mano de obra, contratada para la siembra, la cosecha, el secado y fraccionado del producto.

La asamblea de cierre

Finalmente, el día domingo, muchos vecinos de la localidad de Esquel, suspendiendo o postergando en muchos casos el tradicional almuerzo familiar, se reunieron a debatir sobre las jornadas y a presentar propuestas de acción. Luego de una emotiva interpretación del coro Coronopio, se realizó la Asamblea. De allí surgieron propuestas tales como la producción de kiwicha o amaranto, cultivo ancestral de alto valor energético cuyo consumo se ha ido perdiendo en el tiempo; aparecieron cuestiones tales como la necesidad de la realización frecuente de este tipo de encuentros; se tocó el tema de regularización de tierras para la producción; revisión del Código Alimentario; demandas por parte de la Asamblea hacia los órganos púbicos tales como Bosques, INTA, SENASA o CIEFAP, de diseño de proyectos fructíferos; la escasez de agua, siendo indispensable su manejo criterioso, estimulando su ahorro; se planteó la necesidad de creación de un centro de comercialización de productos artesanales; el aprovechamiento del valle medio del río Chubut para la producción de alimentos; en cuanto al turismo, se reconoció su declive en los últimos años, y se debatió sobre la necesidad de un desarrollo, promoviendo el manejo de sectores tales como laguna La Zeta, Cañadón de la Paloma, La Buitrera, La Palestra, el cerro La Cruz, Cañadón de Borquez; se recalcó la posibilidad de promoción al consumo interno de productos regionales tales como el choique, guanaco, liebre, etc. Todo esto más otros proyectos están siendo pensados para ser tratados en comisiones y elevados al municipio, en pos de su concreción.

Conclusiones

Loable propósito el del Foro, la promoción de un desarrollo económico sustentable y respetuoso del hábitat que nos cobija y nos brinda alimento. El conjunto de posibilidades que se vislumbraron en estos tres días arrojan esperanzas así como también el interrogante de saber si estamos hablando de proyectos realizables o de utopías. La sociedad toda de nuestra Patagonia, y principalmente los gobiernos presentes y futuros, emergentes de esta sociedad, deberemos decidir sobre nuestro futuro. Si consideramos viable y justo un modelo de desarrollo “para toda la vida”, para nuestra generación, la de nuestros hijos, la de nuestros nietos…, que demandará esfuerzos de creatividad y austeridad, entendiendo a la austeridad como ausencia o exclusión de los patrones de consumo actual; o seguimos mirando a un costado, dejando que la creatividad sea de otros, los creativos del norte, que complementando la misma con su habitual ambición, nos condenan al subdesarrollo y desigualdad, como ha pasado históricamente.

La megaminería nos ofrece nuevamente espejitos de colores, en los que podremos vernos bostezar gesticulosamente todas las mañanas, levantando nuestros brazos hasta casi tocar el cielo, cambiándonos, peinándonos, pensando en nuestras cuentas al día, o no tanto y… pero si en algunas de esas mañanas se nos ocurre pensar en el futuro, tras quince o veinte años de explotación minera, ¿en qué pensaremos? Probablemente el desayuno nos provoque una indigestión.
Es por todo esto que hoy más que nunca es necesaria la participación ciudadana para defender nuestra posibilidad de un futuro mejor, verdaderamente sustentable, con la pretensión de encaminarnos a una real justicia social, y aunados en el respeto al medio-ambiente en este lugar privilegiado que es la Patagonia toda.