LA EXPLOTACION MINERA EN SAN JUAN – ARGENTINA Y EL VIRTUAL LEVANTAMIENTO POPULAR CONTRA LA MACROMINERIA, por Javier Rodríguez Pardo

OCHO DIAS HISTORICOS

La quimera de trabajar para la Corporación Barrick Gold y las subcontratistas que construyen caminos y dependencias, en las alturas de la Cordillera de los Andes sanjuaninos, termina siendo una ilusión pasajera. En principio porque las empresas emplean gente preferentemente de países limítrofes y de otras provincias, mientras que quienes acceden a la tan ansiada nómina, terminan renunciando por las inclemencias del tiempo y el mal de altura, que ya se cobraron al menos seis víctimas (Diario Las Noticias, San Juan, miércoles 28 de abril 2004, y semanario “La Séptima”).

Trabajar para Barrick Gold en los yacimientos mineros de Veladero y de Pascua-Lama, es una tortura. La escasez de empleo es el arma de extorsión de que se vale la multinacional canadiense, ubicada en el mundo financiero entre las más conocidas, como Río Tinto, Freeport Mac Moran, BHP-Billiton, Newmont, Placer Dome, entre otra menores pero igualmente destructivas, todas con oficinas en Canadá, Estados Unidos, Reino Unido y Australia. Pero la Barrick, como las otras, es incapaz de ocultar daños ambientales, enfermedades y muerte, operando las plantas de Veladero y Pascua-Lama a cinco mil metros de altura de promedio.

La gente del departamento de Iglesias, pobladores de Rodeo, Tudcum y Jàchal, me acercaban informes de unos quince trabajadores que habían perdido la vida. Pero al momento de exigir datos más concretos, nombres y circunstancias, comenzaban los inconvenientes para presentar las denuncias: el silencio de la empresa ocultando información, el traslado de enfermos y víctimas hacia establecimientos fuera de la provincia de San Juan o alejados de la zona minera, la soledad de los trabajadores sin testigos familiares y sin control oficial alguno, son algunas de las razones de la impunidad con que opera Barrick Gold.

Desde San Juan, capital, decidimos ir primero hasta “El Zonda”a pocos kilómetros del Paso Cordillera del Norte sanjuanino, donde sabíamos de pobladores que deseaban encolumnarse en esta campaña contra “la minería salvaje”, expresión de buena parte de la gente de Iglesias. Un grupo recorrió la zona invitando a charlas debate y a una concentración en Rodeo. Lugares como Pismanta y Termas Rosales pasando por el Dique del Viento, entre los afamados complejos termales, fueron destinatarios de nuestros mensajes. Un poco antes del mediodía entramos en Rodeo, villa cabecera del departamento de Iglesias y casi de inmediato las dos radios FM cubrían nuestra presencia insistiendo con la concentración de la tarde. De la Colonia San Guillermo, al refugio del Godo hay seis horas y cuando las nevadas crecen se congela el Glaciar de Vallejos (Conconta), hoy abierto al medio por la Barrick que, como todos los caminos deben tener allí 35 metros de ancho, para que transiten sus máquinas y camiones hacia Veladero; la imagen aún la estoy procesando siguiendo el dedo indicador de Ricardo Vargas, guía y señor de las alturas en la Reserva de Biósfera de San Guillermo, avezado conocedor de su San Juan y hoy convertido en vecino auto convocado contra esta política extractiva de macro minería, como tantos otros que impulsan esta lucha por toda la provincia, verdaderos motores generando conciencia: la docente universitaria Silvia “Yioyi” Orozco; Ester García e Indiana Sauvournin que no dejaron espacio sin filmar, registrando testimonios, de amas de casa a documentalistas; Domingo Cavalier, nuestro anfitrión, y Juan Ortega Luna, excelente músico con quien quedamos en deuda por tan generosa despedida, es otro referente del lugar y antiguo vecino de Jáchal. Manuel y su esposa, maestra de una escuela increíble en el faldeo de la Cordillera, a 40 kilómetros de donde viven, en el Zonda. Sé que tendría que mencionar a muchos otros, pero estos son quienes aparecen en plena asamblea de RENACE, en Mendoza; la Red Nacional de Acción Ecologista que, con sus ochenta organizaciones no gubernamentales cubriendo gran parte del país, fue testigo de un nuevo movimiento social. Pero personalmente, ya me había comprometido mucho antes con ellos para ir a San Juan y transmitir nuestra experiencia. Con muchos profesionales pudimos compartir ideas sobre la macrominería, como así también con organizaciones ecologistas y asociaciones civiles intermedias de la región cuyana.

Muy cerca de la explotación minera de Veladero se halla el complejo extractivo de Pascua-Lama, de la misma multinacional. Un túnel de unos 5.600 metros por casi cuatro de alto y otro tanto de ancho, les permite sacar minerales por Chile hacia el Pacífico, con destino al primer mundo. Por tanto, podrán ingresar insumos, máquinas y efectos diversos para la explotación y cuanto desee la minera. Hoy es una realidad inocultable.

Para acceder debemos franquear el puesto de gendarmería que está en la base de la Cordillera, a 156 kms. de Veladero y a sobrados 2.000 metros de altura. Este puesto de fronteras impide el paso de vecinos, guías y turistas, pero cualquier empleado de Barrick Gold provisto de tarjeta magnética, circula libremente. De hecho vimos el tránsito de camionetas con logos de la minera, con total libertad y sin detenerse. Nosotros, en cambio, continuamos hacia nuestro objetivo, los asentamientos de El Zonda y Tudcum (600 habitantes), donde nos estaban esperando para participar de las asambleas de auto convocados. En El Zonda almorzamos acompañados por unos veinte vecinos que rechazan a la minera y en Tudcum, a través de una charla, no sólo contamos el caso Esquel sino que contestamos tal variedad de preguntas que nos permitieron abrir nuestro propio y limitado horizonte. En Tudcum nos recibió la Junta Vecinal en pleno, y enseguida conoceríamos a Luis Aguilera que integra el grupo DENOCON (“Desarrollo No Contaminación”), con 27 vecinos que sólo desean “producir alimentos sanos y poder venderlos”, nos decían.

Nuestro interés se centró en Rodeo (8.000 hab.) porque la Barrick le dio trabajo a unas cuarenta personas, regala vehículos al municipio, reparte una que otra ambulancia, y ofrece algunas atenciones monetarias, sistema típico de los países del Norte para integrarse en un medio y frenar cualquier hostilidad o antipatía. (Por todos lados nos explicaron que el caso Esquel para la Barrick fue un aprendizaje). Con disgusto no declarado, las dos radios FM de Rodeo (Oasis y Cumbre), nos dieron el tiempo suficiente para hablar de este flagelo del nuevo mundo globalizado, las invasiones mineras quinientos años después, y pudimos convocar a un rápido debate en la plaza pública. El frío no impidió que vecinos preocupados de Rodeo y quienes se acercaron de Tudcum, vieran amenazados sus cultivos y su condición de zona turística y de descanso. El éxodo se refleja en la cantidad de viviendas que se ofrecen en venta. Mientras tanto, las camionetas de la Barrick y otra del municipio con el intendente de Rodeo, giraban alrededor de la plaza, enviándonos otro mensaje.

Al oscurecer encaramos para Jáchal (24.000 hab.) y una vez más el fervor de este pueblo nos emocionó hondamente. Era sábado y el salón a pleno esperaba nuestra visita que se había iniciado dos días antes cuando nos “obligaron” (sic) a permanecer todo el día recorriendo medios de difusión y los programas locales de televisión por cable. Primero fue en la calle, en las puertas de la Municipalidad y sobre el pedestal de la bandera, improvisamos un acto. A partir de aquí no paramos hasta que, pasadas las ocho de la noche, se abrieron las puertas del salón principal, pegado a la Iglesia, colmado con más de cuatrocientos jachalleros que continuaron participando más allá de la vereda. Retornamos a San Juan capital, a las 5,30 de la madrugada. Pero ese día vivimos en Jáchal su primera gran concentración de auto convocados por el no la mina, decretando a mano alzada, “que se vaya la minera Barrick Gold”. Hoy Jáchal está en marcha, sin olvidar que el “gobierno provincial, socio de la minera”, amenaza con presiones económicas, temores que tampoco impidieron la formación de cinco comisiones de jachalleros auto convocados: coordinación general, prensa y difusión, investigación (información), recursos, y asuntos legales.

Pero debemos ser justos. Para llegar a esto tuvimos que sortear ocho días históricos, a partir de aquel lunes en la radio “AM/FM Las 40”, del periodista Antonio Canales, en el centro de la capital de San Juan, que nos permitió convocar a un debate en el local del sindicato de la UTA. Casi una hora y media en el aire dialogando con el pueblo que se pronunció decididamente contra este despropósito de contaminación y saqueo. De modo que el anuncio previo sobre la quietud de los sanjuaninos fue desapareciendo en la charla debate y al día siguiente, 25 de Mayo, en la plaza principal, pleno desfile cívico militar y megáfono en mano, exigimos que “los pueblos deben opinar y ser escuchados, discutir las invasiones mineras y participar por si o por no, pero que quedarse al margen es inmoral”. El director de “Las 40”, repite durante la mañana siguiente la grabación de nuestra nota, y de nuevo otra asamblea en la capital permite formar las comisiones de auto convocados. Una más en el Municipio de Santa Lucía y ante unas 250 personas que no dudaron en pedir que se vaya la Barrick Gold. Aunque en esta oportunidad debemos mencionar el compromiso asumido por su intendente, el médico Vicente Mut y por Daniel Illanes, profesor de la Universidad Nacional de San Juan, quienes participaron activamente del encuentro. A poco, comenzaron los medios a vernos de otra manera y, en todo caso, a dejarnos opinar interrogándonos tímidamente. Dos charlas en la Universidad, en Ciencia Sociales y en Ciencias Políticas y una pendiente en Ciencias Exactas, por falta de tiempo, ubican el interés que despertó el debate en San Juan. En radio Universidad de San Juan, radio Nacional y distintos medios de prensa, nos tuvieron en todo momento. Había que instalar el debate minero y, francamente, lo conseguimos.

Pero este informe que pretende ajustarse fielmente a los hechos durante estos ocho días, merece otros datos, para que todos podamos apreciar de qué se trata y que fue lo que se debatió y aún discute San Juan.

Pascua-Lama y Veladero

La corporación Barrick Gold extraerá oro, plata y cobre de los yacimientos Pascua-Lama, contiguos al emprendimiento Veladero. Se halla en los límites trasandinos a unos 150 kilómetros de Vallenar, en Chile. Obtendrán metal Doré (oro, plata y concentrado de cobre), en lingotes de 31 kilos, y está a cargo de Barrick Gold y sus subsidiarias inventadas para la ocasión, Compañía Minera Nevada S.A., en Chile y Exploraciones Mineras Argentinas S.A., en Argentina.

El concentrado de cobre sale por puertos chilenos en camiones hacia sus fundiciones, generando relaves y tóxicos letales envenenando ambas cuencas, la del Pacífico y la del Atlántico. En este sentido, Chile posee sobrada experiencia de cómo no deben hacerse estas cosas, si es que aún tiene presente El Chañaral, en Atacama, III Región, y de qué manera destruyó toda forma de vida marina y el servicio turístico floreciente: hoy ofrece éxodo y desolación. Un documental que recoge tamaño desastre se lo dejamos a los auto – convocados sanjuaninos para su difusión. Y esto debe saberlo el pueblo chileno porque al sur de Chañaral y cerca de la frontera con Argentina se halla Vallenar, vía indicada para sacar los metales hacia los puertos del Pacífico, como ya dijimos. Siempre en la III Región.

Aquí debemos explicar que la Barrick puso en práctica el Convenio Binacional Argentino Chileno: “El ámbito de aplicación del Tratado entre Argentina y Chile sobre Integración y Complementación Minera contiene los parques nacionales sin cláusula alguna que preserve su integridad. El tratado de minería fue firmado el 29 de diciembre de 1997 y su protocolo complementario el 20 de agosto de 1999, sin cláusula alguna que preserve la integridad y la ecología de los parques y reservas, tanto provinciales como nacionales, y de otras áreas turísticas que se hallan en su ámbito de aplicación. El tratado permite a los inversionistas la exploración y explotación de los recursos mineros existentes y el uso de los recursos naturales para ello, en el ámbito de aplicación sin ningún tipo de restricción, aplicando el principio de trato nacional y otorgando facilitaciones fronterizas que pueden ser ampliadas mediante protocolos adicionales específicos, es decir, el tránsito entre Argentina y Chile será para ellos sin restricciones, con el peligro de desarrollo de actividades ilegales a su amparo. La integridad de los Parques Nacionales y otras zonas turísticas, también se verá afectada por la existencia de un Protocolo de 1993 que se refiere a la facilitación de actividades de trabajo aéreo, es decir, explotación a cielo abierto que deja un cráter como resultado final. Este tratado no es el primero sobre el tema que se suscribe con Chile. El mismo se inscribe en el marco del Acuerdo de Complementación Económica, donde se conviene esta actividad en varios y sucesivos protocolos hasta 1993, complementados con el Tratado de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones de 1991. Las Bases y Fundamentos de un Tratado de Integración y Complementación Minera de 1996. El Memorándum de Integración Física y Facilitación Fronteriza. La actuación de la Comisión Parlamentaria, ha sido toda a espaldas del pueblo argentino, que no fue informado debidamente por los medios. El ámbito de aplicación del tratado abarca toda la zona occidental de nuestro país, próxima al límite con Chile. De gran desarrollo turístico. En cambio en Chile es muy angosta que no afecta sus parques nacionales ni otras zonas turísticas. De Norte a Sur, afecta los siguientes parques provinciales y reservas nacionales, y parques nacionales: Parque Provincial y Reserva Nacional de Ischigualasto (San Juan) y de Talampaya (La Rioja). Reserva de Biosfera San Guillermo (San Juan). Parques Nacionales: Laguna Blanca (Neuquen), Lanín (Neuquen), Nahuel Huapi (Río Negro), Lago Puelo (Chubut), Los Alerces (Chubut), Perito Moreno (Norte de Santa Cruz), Termas: Fiambalá (Catamarca), Pismanta (San Juan), El Sosneado (Mendoza), Copahue y Caviavue (Neuquen). Embalses: los Nihuiles I, II y III y Valle Grande sobre el río Atuel, Los Reyunos sobre el río Diamante, Agua del Toro, todos en Mendoza. Los ríos sobre los que se construyeron las represas y embalses, nacen y transcurren en el área de aplicación, con peligro cierto de contaminación de la cuenca y del embalse por la actividad minera si no existen cláusulas específicas que excluyan estas áreas.” (Dra. Teresa Ana Maknis).

Este “instrumento legal” creado por el gobierno de Carlos Saúl Menem complementa la tenebrosa legislación para una política extractiva de entrega absoluta merced a la ley de Inversiones Mineras y otras (ver www.noalamina.i8.com ). Una vez creado el marco jurídico se contrató ejércitos de geólogos al servicio de los invasores de la extracción y saqueo. En San Juan, los complejos extractivos Veladero y Pascua-Lama, se hallan sobre la Reserva de Biósfera San Guillermo, casi un millón de hectáreas, declarada de esta forma por la UNESCO en 1981, y Parque Nacional San Guillermo en 1998. “Es el corazón de la Reserva de Biosfera”, repite incansablemente Ricardo Vargas, guía profesional, acostumbrado a transitarla. Una desquiciada ley provincial separa las hectáreas que explota la minera declarando que no pertenecen a la reserva, sin explicar cómo se puede hacer esto con estas tierras que están en el centro superior de la Reserva de Biósfera. Observar esto en un mapa no resiste análisis alguno, pero así funcionan los gobiernos cómplices del despojo. El resto lo hace el acuerdo binacional, como ya vimos, documento imprescindible para las Barrick Gold del país.

¿De qué estamos hablando?

El mineral de oro y plata – y otros metales no refractarios- es sometido a lixiviación con cianuro de sodio. Luego irá a un circuito de decantación para separar los minerales ricos mientras que los sólidos residuales se los tratará con anhídrido sulfuroso (SO2) intentando eliminar el cianuro residual (dice la minera) y luego al tranque de relaves. Mediante polvo de zinc (proceso de Merryl Crowe) se obtiene una precipitación de oro y plata que con el zinc se fusiona en barras de metal Doré. El proceso deja un cóctel tétrico de residuos en las altas cumbres donde nacen las aguas de San Juan, en tanto las barras de metal Doré saldrán por los puertos chilenos (o argentinos) hacia el extranjero.

El control del Estado Nacional no existe. La minera dice que no habrá residuos líquidos; un cuento al que ya nos han acostumbrado, por lo tanto serán residuos sólidos, pero no niega que “el agua residual quedará retenida en los relaves” (y después veremos como continuará la historia en el tiempo).

Pascua Lama le permitirá a Barrick una producción de 5.000 toneladas de cobre, 615.000 onzas de oro y 18,2 millones de onzas de plata, mientras que las reservas son de 14,1 millones de onzas de oro, 461 millones de onzas de plata y 180.000 toneladas de cobre. Invertirá 950 millones de dólares durante 20 años y se calcula que el despojo que sufrirá el país superará diez veces el de Veladero y Cordón Esquel juntos, aunque ya sabemos que el militante y paciente pueblo de Esquel impidió éste último. Porque una cosa es la afirmación oficial de los volúmenes reconocidos y otra la cantidad que saldrá por el Pacífico.

Los pueblos de Argentina y Chile no tienen ni idea de lo que está ocurriendo en las altas cumbres de la Cordillera de los Andes sanjuaninos. “Algunos gobernantes, sí”, nos contaba Fredy Espejo, quien durante seis años y medio trabajó en el complejo de la Barrick Gold en carácter de especialista en medio ambiente. Espejo asombró a la asamblea de auto convocados de Jáchal, el sábado al que ya hice referencia, afirmando que abrieron rutas destrozando el Glaciar Conconta, fabricaron el túnel hacia Chile, entran y salen camiones sin control, muere gente por la altura escondiendo los informes, se contaminaron aguas y napas por el deficiente sistema cloacal en este hábitat creado a 5.000 metros de altura, contratan gente de otras localidades, desprotegen al obrero en los trabajos pesados sin importarles la altura, el clima y la presión, y afirmó que personalmente vio al actual gobernador de San Juan con los empresarios de la Barrick deambular de noche en vehículos hacia Chile, en viajes de ida y vuelta y después de prolongados encuentros en las alturas andinas. Esta declaración tuvo más de 400 testigos y personalmente pude ver, en la película que aportó, de qué forma destrozaron el glaciar y el tamaño de la ruta. Por lo demás, apenas pasan de cien los contratados por la minera que viven en los pueblos que hemos mencionado, cuando habían prometido que emplearían a miles.

El Estudio de Impacto Ambiental de Pascua – Lama dice con claridad que “la demanda de agua será abastecida desde el río de Las Taguas, en Argentina” y escasamente del lado chileno, y que “Barrick dispondrá de los derechos de aprovechamiento según crea necesario” (por eso el acuerdo binacional, por ejemplo); y así será por 20 años, tiempo que implicará llevarse las reservas, dejándonos las secuelas de los drenajes ácidos, destrucción de la Reserva de Biosfera de San Guillermo, excepcional asiento de las vicuñas en opinión de la UNESCO, y de todo el ecosistema de las altas cumbres, acuíferos subterráneos, ríos y arroyos, y de toda calidad de vida aguas abajo. En Jáchal comprobamos que un águila parecía recuperarse al haber sido atrapada por los cables de alta tensión, pero un cóndor no tuvo la misma suerte; las explosiones frecuentes y los movimientos provocados por la explotación de Veladero y Pascua – Lama, son el origen de historias como éstas.

Las emisiones del material particulado al pulverizar las rocas a pura explosión, y luego molida, en algunos casos a dos micras, y en otros al tamaño de una pulgada, dejarán en suspensión, a merced de los vientos, importantes volúmenes de metales y otros minerales liberados por las explosiones y que -inevitablemente- serán respirados: plomo, arsénico, uranio, cromo, zinc, asbesto, mercurio, azufre, cobalto, manganeso y tantos otros conforme coexistan en el medio explotado. Son todos yacimientos polimetálicos que se encuentran diseminados en extensiones kilométricas.

Cuando discutimos con estas multinacionales dedicadas a la macrominería salvaje, aunque el uso de ambos términos produzca redundancia, les recordamos que “la minería es una de las actividades más dañinas, en términos ambientales, que desarrollan los seres humanos. En Estados Unidos, la minería de recursos no combustibles produce cuando menos seis veces más desechos sólidos que la cantidad total de basura que produce el país, en todos sus pueblos y ciudades. Las minas superficiales, abandonadas y sin restaurar, de carbón y de metales en Estados Unidos, cubren una superficie estimada de 90.000 kilómetros cuadrados. Esa superficie es más o menos la del Estado de Indiana. Esta cifra no comprende la extensión, quizás mayor, de canteras, pozos y minas abandonadas de arena, grava y piedra.”( Ecología y Medio Ambiente de G.Tyler Miller, Jr. G.E. Iberoamérica, página 564).

Los datos nos permiten refrescar la memoria y comparar el gigante minero de Veladero y Pascua Lama, con la provincia de San Juan, sus efectos, los pueblos fantasma que dejará a su paso, sin considerar el despojo de los recursos naturales dilapidados por un país consumista y que despilfarra, como ocurre con todas las naciones del Norte que bailan el ritmo del globalizador.

La Barrick utilizará el agua que necesite, como ya dijimos, y no pagará por ella. ¡Qué ironía semejante destino, al pueblo de San Juan se le cobra, sus agricultores deben pagarla! (Edicto 519-0280-11-99 Departamento de Hidráulica de San Juan).

Cuando ya no queden metales que importe extraer, la Barrick no se quedará un día más en San Juan. Serán los sanjuaninos y sus descendientes quienes evitarán pensar en un futuro sin movimientos sísmicos o que por lo menos ocurran lejos del departamento de Iglesias y que ninguno se asemeje al de Caucete. La Barrick se irá del lugar dejando la escoria letal en las altas cumbres, paradigma del nacimiento de las aguas.

En San Juan no extrañan las lluvias; están acostumbrados a mirar la cordillera nevada, con eso es suficiente. Recuerdo un diálogo de un poblador de Tudcum indicando que nadie se pone de acuerdo con el significado de ese nombre: “Agua bajo la loma” dicen unos, en cambio otros apuestan a “agua que chorrea”. Pero nadie deja de asociar a Tudcum con el agua prístina de todos los días.

Para tener idea de lo que se piensa hacer en Veladero, que también utilizará el cianuro, debemos decir que lixiviarán sobre una gran plataforma de siete kilómetros, con pilas de material de unas quinientas mil toneladas cada una, en todo su recorrido. Se las regará con una solución de cianuro. Las piedras en Veladero tendrán el tamaño de una pulgada y no serán pulverizadas a dos micras como se pretendía en el Cordón Esquel, pero para el caso es lo mismo. Además, no han desistido de utilizar ambos sistemas, como mejor crean e impermeabilizarán los kilométricos estanques con plástico HDPE, y tampoco con esto hay garantía y menos en un sitio que cuenta con movimientos sísmicos relevantes. La longitudinal plancha de lixiviación al pie del Cerro Pelado tendrá siete kilómetros de largo por dos de ancho y nadie duda que allí se instala la gran bomba de tiempo sobre la provincia de San Juan (y hacia el Atlántico).

El sistema es muy parecido al usado en Tambo, donde a poco de comenzar, debieron cancelar la extracción al detectar cianuro en filtraciones profundas. Ocurrió en 1994, pero en 2001 se contaminó el río de Vacas Heladas con cianuro como consta en la Secretaría de Salud de Vicuña. Los grandes hielos y rápidos deshielos superficiales provocaron en Tambo un desprendimiento que rompió la membrana plástica con escapes incontrolables de solución cianurada, escurriendo aguas abajo.

Fue nuestra intención contar en este informe todos los casos mineros de extracción a tajo abierto donde se produjo contaminación y daños en la fauna y flora de los ecosistemas, muertes y lesiones, destrucción de cultivos y desolación pos minería. Pero preferimos sugerir que el lector se remita al Oro de Esquel, donde podrá hallar un informe sobre los efectos del uso del cianuro en minería y algunos de los casos más relevantes. Bibliografías especializadas como el reporte “Minería, Impactos sociales y Ambientales”, preparado por Movimiento Mundial por los Bosques Tropicales. Algunos textos académicos que utilizamos en el presente trabajo; la página web de los vecinos autocovocados de Esquel: www.noalamina.i8.com y en cualquier buscador de Internet.

Quisimos con este primer trabajo sobre la minería en San Juan, dar a conocer hechos y protagonistas: las poblaciones sanjuaninas decididamente encaminadas a expulsar a la Corporación Barrick Gold denunciando a través de sus asambleas qué calidad de vida desean para ellos y para su descendencia y, al mismo tiempo, dejar un ejemplo de lucha a las generaciones futuras. Es tal vez, la mejor síntesis recogida durante estos primeros ocho días que pasamos juntos, ocho días que, se me ocurren, ya son históricos.

Al momento de finalizar este informe, recibo dos significativas llamadas. Una es de la Asociación Vitivinícola de San Juan que nos invita a exponer con reclamada urgencia. La otra fue del periodista de radio Universidad de San Juan, Omar Cereso, adelantándome que luego de nuestro andar por esa provincia, la Barrick Gold utilizó todos los medios a su alcance para contrarrestar nuestro mensaje y que por primera vez reconoció que hubo “tres mineros muertos en distintos accidentes, pero que no se debieron al mal de altura”

Quienes lean esto podrán deducir de qué forma se depende de la empresa minera, juez y parte de todo lo que hace, y qué pobre y triste papel es el del gobierno provincial, que encargado de controlar las actividades de la Barrick es cómplice de ocultar muertes que debería haber investigado. Pero ¿qué podemos pedirle a un gobierno que fue capaz de excluir la práctica de audiencias públicas en la industria minera?

Nada de esto evitará la realidad presente. En dos correos anteriores anunciamos que los autoconvocados contra este flagelo ya somos miles, y que San Juan está de pié.

Javier Rodríguez Pardo, San Juan, Junio 2004
Movimiento Antinuclear del Chubut (MACH)
Sistemas Ecológicos Patagónicos (SEPA)
Red Nacional de Acción Ecologista (RENACE)