Bajo una intensa lluvia, vecinos y ambientalistas de Metán, El Galpón, El Quebrachal y Joaquín V. González cortaron el sábado durante tres horas el tránsito en ruta nacional 16. La protesta tuvo lugar a la altura del pueblo de El Tunal. Fue en rechazo a la instalación de una planta para producir nitrato de amonio y exigir que detengan la contaminación y la depredación en el río Juramento.
Fuente: El tribuno
Durante la jornada se sucedieron tres cortes de una hora cada uno, en los que se permitió el paso por breves lapsos de automóviles, camionetas, camiones y colectivos. La medida originó largas filas de vehículos en ambos sentidos. La manifestación se inició a las 17.30 y concluyó a las 20.45.
Durante la medida se vivieron momentos de tensión, ya que camioneros y automovilistas reclamaron su derecho a circular libremente. Hubo forcejeos y empujones. Sin embargo, la manifestación se llevó a cabo según lo previsto y concluyó sin mayores incidentes.
“Realizamos este corte de la ruta 16 porque estamos desesperados, cansados, sin recursos y no obtenemos respuestas. Este Gobierno de (Juan Manuel) Urtubey no nos escucha y sigue adelante con la instalación de una planta para producir nitrato de amonio en El Galpón que va a ser altamente contaminante y perjudicial para el medio ambiente”, dijo Martín De Biasi, un vecino de El Tunal.
Desde el 14 de mayo del año pasado, los protestantes llevan adelante un “tranquerazo”, con acampe, en el acceso al predio de la empresa Austin, a la vera de la ruta nacional 16, entre las localidades de El Tunal y El Galpón. Ahora resolvieron endurecer las medidas en los próximos días impidiendo el acceso del personal y vehículos de la firma y realizando otros cortes totales de ruta.
“Salven al Juramento”
Los vecinos y ambientalistas también se manifestaron para solicitar a las autoridades que detengan en forma inmediata la contaminación que está sufriendo el emblemático río Juramento en la zona de El Galpón, por basurales a cielo abierto y líquidos cloacales que desembocan en el cauce sin tratamiento alguno.
“Yo, mis hijos, mis otros familiares y vecinos apoyamos esta protesta. Defendemos al medio ambiente y especialmente al río Juramento que va a ser contaminado por este emprendimiento extranjero y perjudicado por la extracción indiscriminada de agua, que escasea en la zona”, dijo Raúl Vicente Villa, un pequeño productor de El Quebrachal