Vecinos del Foro Ambiental y Social de la Patagonia (FASP) y asambleas de la cordillera durante el pasado fin de semana realizaron la caravana por la “vida y el territorio” en el área de la meseta donde la multinacional Panamerican Silver desarrolla el proyecto Navidad para extraer plata y plomo con el respaldo gubernamental. En las comunas rurales de Telsen, Gan Gan y Gastre se hicieron reuniones de difusión, a pesar del clima intimidatorio y adverso por parte de los representantes comunales. Además, comunidades mapuche-tewelches convocaron a una marcha de antorchas por las calles de Gan Gan el sábado 11 de setiembre que reunió 200 personas en un pueblo de 1.000 habitantes.
Por Foro Ambiental y Social de la Patagonia
MEGAMINERÍA: DEFIENDEN EL DERECHO A LA INFORMACIÓN
Vecinos del Foro Ambiental y Social de la Patagonia (FASP) y asambleas de la cordillera realizaron una caravana por la “vida y el territorio”. Viajaron al territorio donde hoy la multinacional Panamerican Silver desarrolla el proyecto Navidad para extraer plata y plomo. Llegaron desde Puerto Madryn, Trelew, Comodoro Rivadavia, Esquel, Lago Puelo y Bariloche para compartir información y escuchar la voz de los pobladores de la meseta central.
Por las comunas rurales de Telsen, Gan Gan y Gastre realizaron reuniones de difusión sobre la megaminería a cielo abierto, a pesar del clima intimidatorio y adverso por parte de los representantes comunales. Gracias a la buena predisposición de los vecinos del lugar que ofrecieron espacios propios o trajeron los elementos necesarios desde sus casas para armar una carpa improvisada, pudieron exhibir documentales que muestran la situación de otros pueblos argentina y otros países luego de estas explotaciones con este tipo de tecnología.
El salón comunitario de Gastre y el gimnasio municipal de Telsen habían sido debidamente solicitados por los asambleístas y oportunamente cedidos por Rolando Jara y Gustavo Cornejo, respectivamente. Sin embargo, los vecinos se encontraron con las puertas cerradas a la hora de comenzar la actividad en ambas comunas. En el caso de Gastre, la gran presencia policial que incluyó el traslado de agentes desde Puerto Madryn y la abrumadora cantidad de leyendas a favor de la mina con que amaneció el pueblo (la mayoría de los testimonios indican que fueron pintadas la noche anterior) no impidió que una vecina se animara a quebrar el pacto de silencio y ofreció su propio negocio de comidas para realizar la reunión. Dijo estar a favor del trabajo pero también a favor de la información y que aún no tenía posición tomada. El encuentro se desarrolló ante la atenta vigilancia policial.
“Nos corren con el tema del trabajo porque aquí o tenés un empleo estatal, un plan social o tenés que caer en la minera. Pareciera que no hay otra salida”, se escuchó reiteradamente en las reuniones. Sin embargo, los vecinos se preguntaron por qué en lugar de dejar que la minera utilice semejante cantidad de agua, no se la dejan al paisano para desarrollar su producción de carne y lana. Durante la actual etapa de exploración, la empresa utiliza 100.000 litros de agua por día, el equivalente al uso diario de 400 habitantes y 10.000 ovejas. También se cuestionó la existencia de dos mataderos abandonados en la región y un espacio para lapidación de piedra en la misma situación.
En este sentido, las comunidades originarias fueron muy contundentes: “La explotación minera no es la única alternativa de desarrollo. Todos estos años hemos vivido sin minería, hemos vivido de nuestro trabajo y animales. La explotación minera nos dejará más pobres”. Dichas comunidades mapuche-tewelches convocaron a una marcha de antorchas por las calles de Gan Gan el sábado 11 de setiembre que reunió 200 personas en un pueblo de 1000 habitantes. La movilización se detuvo frente a las oficinas administrativas de la empresa exigiendo la presencia del Lic. Gustavo Ferreira, Gerente de Relaciones Comunitarias, a quien dedicaron cánticos de reprobación. Muchos de los presentes atribuyeron a Ferreira los rumores sobre la supuesta peligrosidad y violencia de los miembros del FASP. Al día siguiente, quedó conformado un grupo promotor de vecinos autoconvocados de Gan Gan para definir acciones futuras.
Algo similar ocurrió en Telsen cuando un grupo de alrededor de 50 personas manifestó su voluntad de abrir el diálogo en la comuna. “La gente está ávida de información, el problema es que hasta ahora sólo escuchamos la campana de la empresa y nosotros queremos escuchar todas las campanas”, señaló una docente. Quedaron en contacto con integrantes del Foro para acceder al material informativo.
A partir del plebiscito de Esquel, donde en 80 por ciento de la población se expidió en contra de este modelo extractivo, existen leyes que prohíben este tipo de minería en la provincia de Chubut. Sin embargo, la empresa canadiense ya se ha establecido y contratado un promedio de 30 personas en cada comuna con sueldos de 3.000 pesos aproximadamente. Por su parte, la población está empezando a ejercer su derecho a la información y comprobando que sólo la participación ciudadana garantizará el cumplimiento de las leyes vigentes.