El Obispo de Esquel, José Slaby, rechazó el desarrollo de la mega minería, sumándose de esa manera a la posición pública de su par de Comodoro Rivadavia, Virginio Bressanelli. Tales posicionamientos se dan en momento que el gobierno de Mario Das Neves avanza con intenciones de derogar la ley 5001 que prohíbe la minería metalífera a cielo abierto y el uso de cianuro.
Fuente: Diario de Madryn
30/10/2009. “Es la postura de la Iglesia en su conjunto, la mía es la misma que la de Bresanelli, adhiero a esa carta e incluso me parece que no se ha mencionado en esa carta el plebiscito que se hizo en Esquel y donde la población de manera mayoritaria manifestó su rechazo a la minería”, señaló Slaby en declaraciones a la emisora FM Del Sur.
“Tanto los gobernantes como los legisladores tienen que responder al voto popular de la gente, su voz debe ser escuchada ya que son administradores del ciudadano votante”, agregó el religioso.
Reconoció que la posibilidad de que el gobierno provincial permita el desarrollo minero en la zona de la meseta tiene que ver con que “siempre hay un nuevo intento del poder de generar y reflotar la discusión, pero yo creo que hay que tener en cuenta a los ciudadanos”. Y agregó que “como dijo Bressanelli, la Iglesia no está contra el progreso, el desarrollo o la exploración, pero sí está en contra de la explotación minera indiscriminada en beneficio de pocos y en perjuicio de muchos”.
La voz de la gente
El obispo reconoció que “se sabe que los pecados cometidos contra la naturaleza después terminan siendo un día reclamados por la propia naturaleza. Y si en Europa se cuida y protege la naturaleza, con más razón nosotros, que tenemos todavía la ecología intacta, tenemos que cuidarla para no producir un desequilibrio ecológico”.
“Debemos aprender de los errores del viejo continente, de cuánto les cuesta a ellos recuperar el equilibrio ecológico. Todos los ciudadanos deben revisar muchísimo más cómo explotamos y hacemos uso de los recursos que nos dio nuestro creador, para no perjudicarnos a nosotros y condicionar el futuro de las generaciones venideras”.
Por otro lado, en declaraciones que publicó “Páginas del Sur”, el Obispo de Esquel subrayó que “los que más están contra la mega minería son justamente los pueblos originarios y piden que antes de tomar decisiones se escuche también la voz de ellos. Si nos proponemos hacer algo, hagamos un gran diálogo y todos con las cartas puestas sobre la mesa, dialoguemos para que las posiciones sirvan al hombre, al ciudadano y también al futuro de nuestro país y nuestra región, porque si esto beneficia a unos pocos por un breve período y después trae perjuicios, no sirve”.
Como se recordará el Obispo de Comodoro Rivadavia, Virginio Bressanelli, difundió una nota donde señala que “ante las recurrentes versiones de posible incremento de la exploración y explotación minera en nuestra Provincia de Chubut, el Obispo de Comodoro Rivadavia, en conjunto con las Comisiones Diocesanas de Pastoral Social y de Pastoral Aborigen, nos dirigimos al Gobierno Provincial, a los Legisladores, al Poder Judicial, a la Comunidad Eclesial y a las Comunidades e Instituciones de Chubut para expresarles nuestra postura, preocupaciones y propuestas.
No nos oponemos a la actividad minera en sí, que, en determinadas condiciones y con determinadas tecnologías, nos suministran muchos bienes necesarios para el funcionamiento del sistema económico y social del país.
Nos oponemos a la mega minería o minería a cielo abierto, con uso de explosivos y de insumos tóxicos cuyo poder de contaminación y producción de desechos, traen efectos devastadores de los bienes naturales como el agua, el suelo, el aire y la luz. Bienes esenciales a la vida humana y al adecuado desarrollo de la misma en armonía con la naturaleza. Bienes a los que tienen derecho cada persona y todas las generaciones tanto actuales como futuras”.