Las gestiones para lograr el desarrollo minero como “manotazo” para otorgarle ingresos inmediatos a la Provincia, son ya un secreto a voces, pese al hermetismo con que se intentó manejar oficialmente.

Al cierre de este despacho se pudo saber que los dos operadores involucrados en el tema, Carlos Eliceche y Jorge Aidar Bestene, viajarán de inmediato a Buenos Aires para tratar de activar los proyectos que involucran a la meseta intermedia, entre los que figura como central el yacimiento que se detectó en 2002 bautizaron como “Proyecto Navidad”.

Una mina privilegiada que guarda al menos unas 600 millones de onzas de plata en su vientre, y que desde fines de 2009 está a cargo de Pan American Silver.

Tal como vienen exponiendo El Diario, los dos operadores de lujo de la cruzada minera, resultaron ambos los asesores en que se basó la estrategia de “recambio” de Gabinete, de Martín Buzzi y el modo en que se podría sostener la gestión con los enormes problemas de caja que hoy expone la Provincia.

Dicen que tanto Eliceche como Aidar Bestene no tendrían la absoluta certeza que sus planes funcionen para Buzzi o la Provincia, pero confiarían enormemente en el negocio que se podría desarrollar y lo que eso significaría en números.

El razonamiento de los asesores, sería que con un escenario petrolero acotado y la mayoría de lo importante renegociado por el ex gobernador Mario Das Neves o por la Nación, a la gestión provincial no le quedaría otra que idear algún otro avance sobre recursos naturales que impliquen caja importante.

Ese es el plan con la minería, cuyo mayor escollo sería salvar el paso legislativo, justificar la decisión política y contar con la legitimación social de las explotaciones.

El primer paso, el DNU

El Ejecutivo sabe que hoy con la debilidad institucional y política que afrontan, no están dadas las condiciones para lanzarse a una aventura de definir un proyecto que no sería de ningún modo convalidado por el Legislativo.

Empezando por la “expulsión” de Fontana 50 del presidente de ese poder, el vice Gobernador, pasando por la resistencia del bloque del FpV que se vio también traicionado en su acompañamiento y ni hablar del bloque del Modelo Chubut que se ubicó como oposición absoluta.

Por eso los asesores habrían sugerido –tal como se hizo ayer con la ‘intervención’ del Banco del Chubut- avanzar con el desarrollo minero mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia. Según lo establecido por el artículo 156 de la Constitución Provincial “el Poder Ejecutivo no puede bajo pena de nulidad absoluta e insanable, emitir disposiciones de carácter legislativo. Solamente en casos de extraordinarias y grave necesidad que tomen urgencia, impostergable o imprescindible la adopción de medidas legislativas para asegurar los fines de esta Constitución, puede dictar decretos por razones de necesidad y urgencia con virtualidad de ley, los que son decididos en acuerdo general de Ministros”, por eso se plantearía desde la Provincia como absolutamente estratégico y vital el avance en la explotación del uranio para el desarrollo energético nacional, habida cuenta la necesidad de lograr el autoabastecimiento.

Con esto se utilizaría un argumento nacional difícilmente oponible desde lo formal. El dato que barajarían quienes apuntan a un modo más meditado de encarar algo tan trascendental como la explotación de los recursos mineros es que si lo hicieran de ese modo, se podría contemplar su no legitimación, teniendo en cuenta que “el decreto pierde efectos jurídicos si la Legislatura no lo ratifica con el voto de los tercios del total de sus miembros dentro del plazo de treinta días contados a partir de la fecha de su comunicación. Además, el rechazo no puede ser vetado”, marca la ley.

El segundo paso, el referéndum

La fuerte oposición que se habría dado a la minería en Esquel, y que se terminó desestimando a través de un referéndum en la localidad involucrada; podría ser ahora el caballito de batalla para activar estos otros proyectos bajo el mismo argumento: aplicando un referéndum sólo en las localidades involucradas, precisamente las de la Meseta. Las que se exponen que no tienen de que vivir y que no poseen otra perspectiva de desarrollo económico que la minería. Además del argumento “productivo” que se utilizaría oficialmente, se aprovecharía increíblemente el plus que dio haber ganado en esas localidades en las elecciones, merced al acompañamiento desde Nación pero para el desarrollo del campo y la ganadería. Otra “avivada” de los asesores que intentan usar a su favor el impulso político y económico promovido por el candidato traicionado por ellos mismo. No es casual que la rueda de intendentes que preside el Gobernador tenga como primeros protagonistas a los dirigentes de esos pueblos tentados muchos de ellos con “espejitos de colores”.

El tercer paso, la legitimación social

Entre las especulaciones que se manejarían, el oficialismo barajaría que con un fuerte derrame económico se podría conseguir en las demás fuerzas
Vivas, el consentimiento para “arrancar con algo”. La actividad que ofrecería al puerto de Madryn y a importantes empresas metalmecánicas vinculadas que hoy tienen capital y mano de obra ociosa, el impulso que otorgaría al aeropuerto y la comunidad de Esquel, similar a la que produjo la obra de la represa Futaleufú; la multiplicación de servicios que podría expandir Trelew y la asistencia de Comodoro vinculada en otros proyectos energéticos que podrían atarse en la zona minera, como la energía eólica, redondearía el convincente argumento para que ´después de todo, si hay minería, que sea en la alejada meseta chubutana, donde no contaminaría mucho al resto de los pueblos y si produciría un derrame económico clave´.
En este paso clave para definir la voluntad del pueblo, no se descarta apelar hasta la intervención divina, ya que fue la Iglesia la que siempre puso fuerte argumento en contra de los megaproyectos. Por ello no se descartaría una reunión de los asesores también con el Episcopado.

La prohibición actual

Por ahora, la Ley 5001 vigente en Chubut, prohíbe la explotación minera a cielo abierto y con el uso de cianuro en todo el territorio provincial. Para que prospere la explotación y que se puedan obtener los permisos de desarrollo, por ejemplo para el conocido proyecto Navidad, debe modificarse el estatus de esa Ley provincial. Sin embargo, nada parece imposible para los nuevos asesores, que vendrían dando muestras de no ser demasiado afectos a las leyes