Aparte de los criterios medioambientales, se asegura que se perderán empleos en turismo y agricultura y ganadería.

Fuente: La Crónica de Salamanca

Gabriel de la Mora, diputado de Ganemos Salamanca, y José Ramón Barrueco, concejal de Equo de Villares de Yeltes, han comparecido este lunes para informar sobre el estado de la situación de la mina de uranio de Berkeley situada en Retortillo y Villavieja de Yeltes.

Según han informado, acaba de finalizar el plazo de alegaciones relativo al uso excepcional del suelo rústico que pidió la empresa Berkeley en el Ayuntamiento. Se han presentado más de 500 alegaciones entre la mancomunidad del Yeltes y otros colectivos con cuestiones medioambientales y técnico-jurídicas sobre el proyecto.

Las razones que llevan a estos colectivos a oponerse al proyecto de la mina de uranio son, en primer lugar, medioambientales, ya que la mina se asienta junto a un terreno protegido por la Red Natura 2000, una zona de especial protección para las aves.

Europa parece estar preocupada ante este proyecto, por lo que están estudiando el impacto ambiental. Colectivos portugueses también se han mostrado preocupados por el proyecto, pues tienen en cuenta la posible contaminación de los vientos con dirección a la frontera con Portugal y la contaminación de las aguas del Yeltes, que desemboca en el Duero y podría perjudicar a los viñedos de Oporto.

Por otro lado, la autorización previa otorgada por el Ministerio de Industria a la planta de tratamiento no tiene en cuenta el carácter radiactivo de los residuos, por lo que Equo presentó un recurso a la Audiencia Nacional que ha sido admitido. Con esta autorización recurrida, a la empresa Berkeley le faltan más permisos, como la autorización de cambio de uso y la autorización de construcción.

José Ramón Barrueco, además, ha calificado de “horrorosa” la información pública. Dicho documento estaría plagado de errores como la fecha equivocada de la concesión minera, que el texto de la información indique que existe un informe favorable emitido por el Consejo de Seguridad Nuclear cuando éste era desfavorable o la mención exclusiva a Retortillo y omisión de Villavieja de Yeltes.

Ganemos y Equo consideran que tienen que valorar esa excepcionalidad de uso, si realmente conlleva beneficios para el pueblo o la comarca. “Nosotros pensamos que es todo lo contrario”, aseguran, ya que creen que se va a perder empleo por el cierre del balneario que hay en esa zona, además de perderlo en sectores como turismo y agricultura y ganadería.

BERKELEY INICIA LA TALA DE ENCINAS

La empresa minera berkeley ha iniciado la tala de miles de encinas en los terrenos afectados por la mina de uranio, a pesar de que la explotación minera está en el aire.

La empresa señala que se verán afectadas unas 5.000 encinas, aunque los vecinos de la zona aseguran que serán el doble. Estos días de atrás ya han visto pasar camiones cargados de troncos de encinas.

Berkeley asegura que replantará 30.000 encinas en 75 hectáreas.

“Esta actuación contemplada en el Plan de Medidas incrementará el valor ecológico de la comarca, al estar sustituyendo una zona de escasa densidad arbórea, con predominio de especies muy envejecidas, con apenas ninguna presencia de regenerado, y que están además muy afectadas por ataques de insectos xilófagos y podas de fuerte intensidad, por zonas que incrementarán claramente el valor ecológico de la comarca”, indica la empresa.

Con independencia de la forestación, Berkeley ya ha adquirido más de 100 Ha de terreno en las que actualmente está iniciando los trabajos preliminares de infraestructura, “todas ellas mediante acuerdos amistosos con sus más de 30 propietarios”.

La actuación de forestación no tiene que ser realizada necesariamente en terrenos propiedad de Berkeley, “sino que puede ser realizada en terrenos de titularidad pública o terrenos privados propiedad de terceros”, indica.

Por otra parte, adicionalmente, el Plan de Explotación elaborado por Berkeley incluye un Plan de Restauración que “recuperará los usos actuales de las 201 hectáreas de suelo que se verán afectadas por las instalaciones mineras y la variante de la carretera SA 322, potenciando la formación de nuevas dehesas, mediante la revegetación con especies autóctonas”.