Miles de personas se manifiestan hoy por tercer día consecutivo contra una planta procesadora de cobre de la empresa Sterlite Copper, filial del grupo minero con sede en Londres Vedanta, en el estado de Tamil Nadu, en el sur de la India. Desde el inicio de las protestas han muerto 12 personas. Los manifestantes están disconformes con la ampliación de la planta de cobre que causa “un montón de problemas de salud y polución” y que “pone en peligro el futuro de la próxima generación”. La batalla de la población contra Vedanta comenzó hace 22 años, cuando la planta era apenas un proyecto. La resistencia se intensificó el pasado febrero en medio de un plan para su expansión que se encontró con la oposición de la población local por su impacto contaminante.

Fuente: EFE

En las dos últimas jornadas se han producido enfrentamientos en que los que se han incendiado vehículos y los manifestantes han lanzado piedras contra la Policía, y las fuerzas de seguridad han recurrido al uso de material antidisturbios y fuego letal contra ellos.

Las autoridades mantienen el toque de queda y han suspendido los servicios de internet en la demarcación administrativa, de acuerdo con la fuente, lo que no ha evitado que hoy continúen las protestas a pesar de que ayer un tribunal de Chennai, la capital regional, ordenó paralizar la expansión de la planta.

Además, las autoridades de Tamil Nadu han cortado el suministro de electricidad a la instalación industrial y han ordenado su cierre permanente, agregó la fuente policial, que pidió no ser citada.

Sajith Attepuram, miembro de la organización Puthiya Podhuvudamai Iyakkam, que encabeza las protestas, teme que los fallecidos aumenten ya que los incidentes continúan.

En declaraciones a Efe, denunció cómo la Policía está “ignorando” el protocolo que obliga a utilizar cañones de agua o dispar pelotas de goma por debajo de la cintura y señaló que hay una “violencia despiadada”.

La organización Human Rights Watch (HRW) también salió hoy a pedir a las autoridades de Tamil Nadu que lidien con los participantes en las protestas de acuerdo con las “leyes internacionales”.

“Las autoridades del estado de Tamil Nadu en la India deben realizar una investigación pronta, imparcial y transparente sobre el tiroteo por la Policía a los manifestantes contra una planta de cobre que causó al menos doce muertos y 80 heridos”, sentenció en un comunicado.

Vedanta confirmó en un comunicado remitido hoy a Efe que su planta de Sterlite Copper permanece cerrada y expresó su pesar por las muertes ocurridas durante las protestas, al tiempo que aseguró que cumple con todas las normativas medioambientales.

“La compañía se ajusta a los rigurosos estándares hechos referente globalmente en cuanto a los parámetros de salud, seguridad y medioambiente. En los últimos años, la compañía ha obedecido indefectiblemente cada norma y regulación puesta por las diferentes autoridades”, reza la nota.

La batalla de los ambientalistas contra Vedanta comenzó hace 22 años, cuando la planta, construida finalmente en 1997, era apenas un proyecto, pero se intensificó el pasado febrero en medio de un plan para su expansión que se encontró con la oposición de la población local por su impacto contaminante.

Los manifestantes están disconformes con un proyecto que causa “un montón de problemas de salud y polución” y que “pone en peligro el futuro de la próxima generación”, en palabras de Attepuram.

Vedanta fue llevada ante los tribunales en 2004 en el estado oriental de Orissa por una demanda presentada por la actividad de una cantera que amenazaba el medioambiente y desplazar a varias comunidades tribales.

En la lucha contra ese proyecto estuvo el activista indio Prafulla Samantara, galardonado el año pasado con el Premio Goldman.