Ambientalistas denuncian el impacto que el proyecto minero ocasiona en el río San Sebastián, de Santa Rosa de Lima, en La Unión. Además insisten en que la Asamblea Legislativa debe aprobar una ley que prohíba la minería para proteger los recursos hídricos y la salud de la población.

Fuente: La Página 

 

Miembros del Centro de Investigación sobre la Inversión y Comercio (Ceicom) denunciaron la contaminación del río que cruza el cantón San Sebastián, de Santa Rosa de Lima, en La Unión, debido a las operaciones que se realizaron por más de 70 años en una mina.

Cidia Cortéz, bióloga de Ceicom, aseguró que la mina comenzó a operar a inicios de 1,900 y durante más de 70 años distintas empresas mineras extrajeron oro y plata existente en el subsuelo del Cantón San Sebastián.

La experta detalló que en 1970 la mina cerró después de ser comprada y vendida en múltiples ocasiones y reveló que uno de sus últimos dueños fue la empresa estadounidense Commerce Group, misma que en 2009 demandó al estado salvadoreño por $100 millones por retirarle los permisos de explotación minera y la cual fue desestimada por el Centro Internacional de Arreglos de Diferencias Relativas a la Inversión (CIADI).

“La mina fue cerrada y no se realizó un cierre técnico, solo fue abandonada sin vigilancia de las autoridades medioambientales”, detalló Cortéz.

Aseguró además que el oro y la plata se encuentran entre rocas y que éstas eran rotas al entrar en contracto con la piedra natural bajo la tierra. Durante ese proceso el agua generaba oxidación y el subsecuente desprendimiento de químicos como arsénico, plomo, hierro y manganesio, lo que finalmente formaba el “drenaje ácido”.

“Durante más de 30 años el drenaje ácido se ha derramado en el río San Sebastián afectando todas las formas de vida acuática de la zona. Ni siuqiera zancudos o renacuajos hay en el río”, lamentó la experta.

La ambientalista detalló que la población del Cantón San Sebastián ha sido afectada directamente, debido a que antes se abastecían con aguas del río de la localidad y ahora “tienen que pagar $0.25 por cantarada y $3.50 por el barril de agua”.

Respecto a los efectos colaterales de la minería metálica, Cortez afirmó que no solamente el agua se ve afectada, sino también,
la salud de la ciudadanía a través de la cadena alimenticia y la contaminación de animales y cosechas de granos básicos.

“La minería deja los químicos como el arsénico y el plomo los cuales son altamente tóxicos para los humanos. Muchos animales comestibles, como el ganado, cerdos, garrobos, aves de corral e iguanas toman de las aguas del río San Sebastián y ellos son acumuladores de químicos en sus organismos, pero al ser consumidos por los humanos causan cáncer y tumores a corto plazo”, alertó Cortez.

Igual sucede con las cosechas como el maicillo, maíz fríjol y hortalizas. Los suelos están contaminados debido a que las piedras sacadas de las minas-que previamente han sido rociadas con cianuro (químico para separar el oro y la plata de las piedras- están esparcidas por todo el lugar y al entrar en contacto con la lluvia generan gases y también contaminan el aire que respira la población.

“Hay basura tóxica en todos lados del cantón San Sebastián y existe un alto contenido de ácido sulfúrico”, enfatizó la ambientalista

Cortez explicó que la minería es “inviable” para el país debido a los graves daños que provoca en la salud de la población, la economia y principalmente para el medio ambiente.

“Tenemos un país densamente poblado, pequeño en territorio y con escasez del agua”, añadió.

Además aseguró que la minería usa miles de millones de metros cúbicos de agua al año, lo que -según ell-, incrementaría el “estrés hídrico” de El Salvador.

La experta de Ceicom reiteró el llamado a las autoridades y principalmente a la Asamblea Legislativa a aprobar una ley que prohíba “de una vez por todas” la minería metálica, aunque detalló que eso no basta, por lo que también se debe luchar contra la minería transfronteriza como el caso de Cerro Blanco, el cual podría contaminar las aguas del Lago Güija y el Río Lempa, dos de las principales fuentes hídricas de El Salvador.

Diario LA PÁGINA trató de contactar a expertos en minería del Ministerio del Medio Ambiente para abordar el tema, pero se nos informó que la persona encargada no estaba disponible; asimismo se nos dijo que desde mayo del años pasado la institución desarrolla un estudio de las aguas del Río San Sebastián para conocer a exactitud el grado de contaminación y después del mismo se tomarían las acciones necesarias para tratar de recuperar el río.

También intentamos establecer comunicación telefónica con las autoridades de la Alcaldía de Santa Rosa de Lima en repetidas ocasiones, pero no fue posible localizarlos.