Las reformas neoliberales aplicadas por Carlos Salinas y Ernesto Zedillo en la década de los 90 del siglo pasado, abrieron indiscriminadamente el sector minero a la inversión extranjera, que se apropió 70 por ciento de las concesiones que suman 92 millones de hectáreas en el territorio nacional. La Cámara Minera de México (Camimex) informó en un reporte reciente sobre la composición de la participación privada en el sector, que el restante 30 por ciento se encuentra en manos de empresarios de origen nacional.
Fuente: La Jornada
En la actualidad, la participación de las firmas extranjeras en la exploración minera en México es superior a dos terceras partes del total. De ellas, Canadá participa con 74 por ciento de los proyectos mineros (que representan 207); Estados Unidos, 15 por ciento (43); China, 3 (8); Australia, 2 (6); Japón, 2 (5); otros, 4 por ciento (11).
Respecto de la distribución de planes, en 2013 se registraron 857 proyectos mineros (exploración y explotación) con capital extranjero, distribuidos en 16 estados.
Así, los estados que aportan concesiones a la inversión minera extranjera son: Sonora, 24 por ciento (204 en esa entidad); Chihuahua, 14 por ciento (120); Durango, 11 (97); Sinaloa, 10 (85); Zacatecas, 8 (66); Jalisco, 7 (60); Guerrero, 4 (35), y Oaxaca, 4 por ciento (33).
Siguen Nayarit, 3 por ciento (22); Michoacán, 2 (19); San Luis Potosí, 2 (17); Guanajuato, 2 (16); Colima, uno (11); Coahuila, uno (11); Baja California, uno (11); Puebla, uno (10); Chiapas, uno (7); estado de México, uno (7); Baja California Sur, uno (7); Querétaro, uno por ciento (5).
Después, en proporción menor a uno por ciento, Morelos, Hidalgo, Veracruz y Tamaulipas, con 12 proyectos de exploración y explotación, como lo describe información del Servicio Geológico Mexicano 2013.
Canadá es el país que más ha aprovechado la tendencia privatizadora de México en el sector minero, y ante su constante búsqueda de nuevos aliados comerciales en el mundo, ha encontrado en nuestro país una fuente de riqueza desde hace más de tres décadas.
Tal realidad se ha detonado en los pasados 20 años a raíz de los diversos tratados y acuerdos comerciales que México ha firmado con diveras naciones. Canadá es el mayor beneficiado en esta ecuación debido también a la falta de una imposición fiscal sobre los recursos naturales, de una legislación armonizada y al abuso de los empresarios sobre las concesiones de la tierra.
Tan sólo, como ejemplo, de las 10 minas de oro más grandes en México, siete están concesionadas a empresas canadienses: Goldcorp, Agnico Eagle, Alamos Gold, New Gold, Yamana Gold y Torex Gold Resources, con la mayor producción de oro en la mina Peñasquito: 411 mil onzas de producción.
Las minas que constituyen un filón de oro para las empresas extranjeras, por su creciente producción son las siguientes:
Peñasquillo (Goldcorp), 411 mil onzas; Morelos Norte, (Torex Gold Resources), 375 mil onzas a alcanzar en 2017, toda vez que comenzó operaciones en 2015; Los Filos (Goldcorp), 340 mil; La Herradura (Fresnillo PLC-Newmont), 314 mil; Pinos Altos (Agnico-Eagle), 234 mil.
Mulatos (Alamos-Gold), 200 mil onzas; Cerro San Pedro (New Gold), 137 mil; La Ciénega (Fresnillo PLC), 125 mil; Mercedes, (Yamana Gold), 116.5 mil.