Un documento de la Agencia Nacional de Minería (ANM) que informa sobre el trámite de estudio de una concesión minera entre los municipios de Córdoba y Pijao (Quindío) puso en alerta a las autoridades y ambientalistas del departamento .Autoridades y vecinos rechazan proyecto por estar en zona de producción de agua.
Fuente: El Tiempo
La carta, que fue enviada en marzo pasado por el vicepresidente de contratación y titulación de la ANM, Eduardo José Amaya, al alcalde de Córdoba, Guillermo Andrés Valencia, señala que, tras efectuarse el respectivo estudio técnico, dicho terreno “no se encuentra superpuesto con ninguna área excluida de la minería”.
La intención de exploración y una eventual explotación en este sector ha causado temor entre los habitantes de la zona.
Alonso Rojas Gámez, habitante de Córdoba y miembro del grupo Ciudadanos por el Agua, expresó que en el área que están tratando de concesionar “nacen las aguas que surten al acueducto de tres municipios y varios corregimientos”.
Según Rojas, el proyecto cubre 1.626 hectáreas, que comprenden al menos 76 fincas de Córdoba, la parte alta del municipio de Pijao y una pequeña zona (9,3 hectáreas) del municipio de Salento y la zona de reserva forestal central.
“Oro Barracuda está tomando a todos por sorpresa para que la sociedad civil y las autoridades no alcancen a reaccionar. Nos van a pedir estudios técnicos, pero el municipio escasamente tiene para pagar sus cuentas”, comentó Rojas.
El alcalde de Córdoba confirmó que varios municipios se benefician con los nacimientos de agua que hay en su municipio. “Nosotros producimos agua para varios municipios; es más lo que nos beneficiamos con el agua que con el oro. No nos interesa la minería, somos ricos con el agua que producimos y debemos protegerla”, aseguró el mandatario.
El vecino Jaime Alberto Bustos afirmó que esas 9,3 hectáreas que podrían ser concesionadas en Salento están ubicadas a escasos tres kilómetros de la bocatoma que suministra el agua a la capital del Quindío.
“Es inminente el daño al Paisaje Cultural Cafetero, la producción de agua y la capacidad agrícola del departamento”, insistió Bustos.
El alcalde de Salento, Juan Miguel Galvis, señaló que el Quindío debe proteger los recursos naturales. “Creo que lo que va a competir con el oro va a ser el agua. Para qué relojes de oro, sin brazos para ponérnoslos”.
El director de la Corporación Autónoma Regional del Quindío (CRQ), John James Fernández, manifestó que la megaminería genera un sentimiento de rechazo en el departamento. “No se trata de una admonición, pero ellos tienen que saber que aquí no queremos controversias de la magnitud de La Macarena”, dijo Fernández.
El coordinador de la Red Nacional de Iniciativas Ciudadanas por la Paz, Jhon Jairo Salinas, le envió una carta al gobernador del Quindío, Carlos Osorio, quien también ha rechazado la minería en el departamento, para que convoque a una consulta popular.
De otro lado, también se han presentado denuncias de un título minero en Calarcá, en la zona conocida como el Alto de Osos, donde se encuentran unas 100 tumbas de los quindos, tribus anteriores a los quimbas, y quienes enterraron restos humanos y vasijas con más de 7.000 años de antigüedad, según advirtió el vecino y fotógrafo Jaime Bustos.