El Huila es uno de los departamentos más ricos en minerales, a tal punto que grandes empresarios y multinacionales han fijado su mirada en el Departamento. En los últimos 20 años fueron otorgados 43 títulos mineros en zonas declaradas de importancia ambiental, equivalentes a 6.845 hectáreas, mientras que otras 89.654 fueron solicitadas para exploración y explotación. Más del 95 por ciento de las solicitudes fueron radicadas por grandes compañías y multinacionales.
Imagen de la concesiones mineras en Colombia en coloresamarillo y rojo.
Fuente: La Nación
El Huila se viene proyectando como uno de los departamentos con mayor riqueza minera y el auge de dicha actividad en tierras ‘opitas’, pone en evidencia tal situación. Entre 1991 y 2010 fueron otorgados 210 títulos mineros para explotar 72.784 hectáreas. Los minerales más demandados son el oro, el mármol, dolomita, material de construcción y la arcilla. En el mismo periodo, se realizaron 485 solicitudes de títulos para explorar y explotar minerales en 766.154 hectáreas del territorio huilense.
De acuerdo con la Agencia Nacional de Minería del Ministerio de Minas y Energía, a mayo del 2012 se encontraban vigentes 194 títulos mineros que correspondían a 63.889 hectáreas, mientras que para el mismo período se tenía el registro de 238 solicitudes de títulos mineros equivalentes a 292.543 hectáreas. La explotación de material de construcción aparece en el primer renglón con 86 títulos mineros. Le siguen en demanda el mármol (38 títulos), y el oro (29 títulos).
De los 194 títulos mineros otorgados, 118 se concedieron mediante contrato de concesión, 39 a través de licencia de explotación, 19 mediante autorización temporal y 11 en licencia de exploración.
Sin embargo, para la Corporación Autónoma del Alto Magdalena (CAM), lo preocupante del panorama minero del Huila es el otorgamiento de un gran número de esos títulos en áreas protegidas por la autoridad ambiental.
De acuerdo con la CAM, 6.845 hectáreas de las zonas declaradas de importancia ambiental por dicha corporación hacen parte del área otorgada por la Agencia Nacional de Minería a través de 43 títulos mineros. El panorama es aún más preocupante si se tiene en cuenta que 77 títulos mineros fueron solicitados para intervenir otras 89.654 hectáreas en las mismas zonas.
La corporación desde el año 2008 ha venido insistiendo a Ingeominas para que reconsidere el otorgamiento de títulos y por ende excluya de la actividad minera las zonas declaradas de importancia ambiental. Pese a la advertencia, a la fecha no se conoce medida alguna para evitar futuros impactos negativos del orden social y ambiental.
¿Zonas en amenaza?
Según la CAM, de los 43 títulos mineros otorgados por la Agencia Nacional de Minería en zonas declaradas de importancia ambiental, entre enero de 1998 y octubre de 2010, 35 fueron concedidos en zonas de reserva forestal, equivalentes a 3.749 hectáreas, cuatro en zonas de parques naturales regionales, equivalentes a 2.950 hectáreas, y dos en áreas de humedales, que corresponden a 146 hectáreas.
Garzón es el municipio de mayor área demandada, con cinco títulos otorgados para intervenir 2.038 hectáreas, mientras que en Pitalito se concedió la principal cantidad de títulos mineros para explotación en zonas de reserva forestal, con un total de 19 títulos equivalentes a 802 hectáreas; le siguen Suaza con un título minero equivalente a 371 hectáreas y Acevedo con dos títulos mineros para intervenir 188 hectáreas.
En cuanto a títulos mineros otorgados en zonas de parques naturales regionales, Íquira es el municipio con mayor área requerida, con dos títulos por 2.413 hectáreas, seguido de Villavieja con un título por 536 hectáreas.
Para el caso de Garzón, la demanda se centra en la explotación de oro, cobre, zinc, plata, platino y molibdeno. En Pitalito, materiales de construcción, arcilla cerámica y ferruginosa; en Suaza, gravas naturales, materiales de construcción, y en Acevedo, carbón y materiales de construcción. El 90 por ciento de dichos títulos mineros fueron otorgados al Consorcio Opita 019 y la Unión Temporal CRGS Pitalito.
Las zonas de mayor influencia para la actividad minera son la Cueva de Los Guácharos, Eco región desierto La Tatacoa, Filo Banderas Ojo Blanco en jurisdicción del municipio de Íquira, y Serranía de Minas en el sur del departamento.
De darse dicha explotación minera, el 62 por ciento de las zonas de reserva forestal sería intervenido por la actividad, así como el 21 por ciento y dos por ciento del área de los parques naturales regionales y humedales respectivamente.
Minería sin freno
Respecto al número de títulos mineros solicitados, según los registros entregados a la CAM por parte de Ingeominas, hasta el 2011 había 77 requerimientos por 363.578 hectáreas, de las cuales 89.654 corresponden a zonas de importancia ambiental. Más del 95 por ciento de las solicitudes fueron radicadas por grandes compañías y multinacionales.
En zonas de parques naturales regionales, 65.220 hectáreas están dentro de dichas solicitudes. Villavieja es el municipio con mayor área requerida con 18 solicitudes por 20.494 hectáreas, la mayoría de ellas realizadas por la multinacional Anglogold Ashanti Colombia S.A, para la explotación de oro, zinc, cobre, plomo, plata, platino y molibdeno. Situación similar se presenta en Íquira, que registra tres solicitudes por 3.723 hectáreas para extracción de los mismos minerales.
En Tarqui se han realizado cuatro solicitudes por 2.795 hectáreas, adelantadas por compañías como Ingeniería y Gestión del Territorio S.A. Igter S.A., y la misma multinacional Anglogold Ashanti Colombia S.A, para la extracción de molibdeno, plata, oro, plomo, platino y cobre; en Oporapa y La Argentina hay tres solicitudes por 1.168 hectáreas.
Once títulos mineros por 15.464 hectáreas fueron solicitados en áreas de páramo, en los municipios de Colombia (8.001 hectáreas), San Agustín (4.961 hectáreas), La Plata (2.481 hectáreas), y Acevedo (20 hectáreas). Asimismo, fueron solicitados 16 títulos mineros por 927 hectáreas en áreas de humedales en Campoalegre, Tesalia, Garzón, Colombia, Altamira, Paicol, La Plata y Yaguará.
En el municipio de Colombia aparecen en el escenario grandes empresas mineras como Comercializadora Internacional Banco Minero Ltda C.I. Minerbank Ltda, y Comercializadora Internacional Carbones de Córdoba y Antioquia Empresa Unipersonal, C.I. Carbocoquia E.U., interesadas en la explotación de cobre, oro, carbón mineral, zinc.
En área de parques naturales nacionales, se solicitaron siete títulos mineros que afectarían 4.136 hectáreas en los municipios de Palestina y Acevedo (3.931 hectáreas), Santa María (163 hectáreas), Teruel e Íquira (27 hectáreas), y San Agustín (15 hectáreas).
También se registraron cinco solicitudes para títulos mineros para intervenir 3.907 hectáreas en zonas de reserva forestal, principalmente en La Plata (3.801 hectáreas), Saladoblanco (90 hectáreas), Isnos y San Agustín (16 hectáreas).
¿Actividad sin control?
LA NACIÓN conoció el contenido de los oficios 33422 del 4 de julio de 2008, 48510 del 7 de septiembre de 2010 y 52217 del 22 de marzo de 2011, enviados por la CAM al Ingeominas, mediante los cuales solicita a la Agencia Nacional de Minería controlar la titulación minera en las áreas declaradas de protección y delimitadas geográficamente por la Corporación, para que dichas zonas sean excluidas de la actividad minera.
“Lo anterior, para que el Ingeominas se abstenga de otorgar título minero a las solicitudes en curso en las áreas de exclusión a la minería de conformidad a la normatividad vigente y para que se gestionen los actos administrativos de revocatoria para los títulos o para las áreas de estos títulos superpuestas a las áreas de exclusión (Parques Nacionales Naturales, Parques Naturales Regionales, Páramos, Humedales)”, señala el último documento enviado por la corporación al director general de la entidad, Óscar Paredes Zapata.
En dichos oficios, la CAM le pide además al Ingeominas que condicione los contratos de concesión en las áreas de reserva forestal, para evitar cualquier tipo de exploración hasta que el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial no adelante la sustracción de dichas zonas.
Sin embargo, fuentes oficiales de la Corporación señalaron que a la fecha ni siquiera se ha obtenido respuesta formal a los oficios. Mucho menos han tenido noticias de la revocatoria de títulos mineros otorgados en zonas de importancia ambiental.
¿Vacíos legales?
En comunicación enviada al diario LA NACIÓN, la CAM manifestó que el fenómeno de la titulación minera en zonas protegidas se debe principalmente a vacíos en la legislación minera. “Los títulos mineros son otorgados por la Agencia Nacional de Minería. La ley no establece las consultas previas ante las autoridades ambientales, razón por la cual un tercero fácilmente puede acceder a un título minero, más no a una licencia ambiental, que es la que expide la Corporación”, argumentó la autoridad ambiental.
De acuerdo con la Corporación, pese al otorgamiento de títulos mineros en zonas de importancia ambiental, la actividad minera no se puede desarrollar sin la licencia ambiental. “Sin uno de los dos requisitos, sencillamente no puede hacer explotación minera y los títulos que se encuentran otorgados en zona de exclusión minera, en ningún momento van a contar con licencia ambiental por parte de la CAM”.
La CAM afirmó también que aunque entre noviembre de 2005 y noviembre de 2010 se solicitaron 167 títulos en zonas de importancia ambiental, en ninguno de los casos ha sido expedida licencia ambiental por parte de la Corporación.
“En varias reuniones sostenidas con el Gobierno Nacional, ha quedado claro que esos títulos no van a ser expedidos. En la actualidad no hay actividad minería en áreas protegidas. En el resto del departamento estamos actuando de manera oportuna y contundente con las autoridades policivas y militares. Desde el año 2008 fueron enviadas comunicaciones del cruce de información de los títulos solicitados frente a las áreas protegidas declaradas ante el SINAP, situación que también ha sido advertida incluso ante los ministros de Ambiente y Minas, para que esta situación no se siga presentando”, señala la comunicación emitida por la autoridad ambiental.
Mientras a mediano y largo plazo el fenómeno de la minería tiende a seguir creciendo en el Huila, ya que de acuerdo con el Ministerio de Minas y Energía se espera que gran parte de las 132.772 hectáreas ubicadas en las zonas mineras especiales del departamento sean subastadas por el Gobierno Nacional este año, aún no es claro el futuro de las zonas protegidas demandadas para desarrollar actividad minera por las falencias existentes en materia de legislación minera, pues las reglas del juego no están claras para las grandes compañías multinacionales que cada vez fijan más su mirada en las áreas de importancia ambiental.