Si se consideran los permisos de exploración y explotación, unas 37,7 millones de hectáreas están concesionadas, lo que equivaldría al 49,8% del total del territorio nacional. Desde el Ministerio están atentos al acaparamiento de concesiones.
Fuente: Pulso
Atentos están en el Ministerio de Minería al uso de las concesiones mineras. Esto, por la superposición de concesiones y el acaparamiento de territorio, lo que se ha transformado en una barrera de entrada para nuevos actores.
Y es que según información presentada por la cartera, obtenida de la gerencia de Exploraciones de Codelco, existen 75,67 millones de hectáreas en Chile, de ellas 37,7 millones están concesionadas para proyectos mineros, tanto de exploración como de explotación, lo que equivaldrían a un 49,8% del total de territorio nacional.
En el desglose, la región que posee mayor número de hectáreas concesionadas es la II Región, con unas 11,32 millones de hectáreas, lo que equivale al 90% del total de la superficie que tiene la zona, entendiendo que existen algunas sobrepuestas. Sin embargo, si comparamos el total de concesiones relativas, la I y la II Región se llevan los honores, con 107% y 103%, del territorio disponible concesionado.
En la vereda contraria, la XI y la XII presentan la menor cantidad de hectáreas concesionadas, con 5% del territorio.
Pero, ¿cómo es posible que el terreno de una región esté sobre concesionado? La normativa por la que se rige esta actividad -la Constitución Política de la República, la Ley Orgánica Constitucional sobre Concesiones Mineras (N° 18.097), el Código de Minería y su Reglamento- permiten la superposición de concesiones.
“Lo que ocurre es que nuestro sistema legal para el otorgamiento de concesiones mineras permite la posibilidad de que exista superposición de concesiones. Por un lado puede haber concesiones superpuestas de exploración, arriba de concesiones de explotación, y por otro lado, en un mismo lugar puede haber dos o más explotaciones de exploración. Ahora, existen los mecanismos para que las concesionarias preferentes puedan excluir a los otros concesionario, aunque si no lo hace pueden haber dos concesiones sobre un mismo terreno”, explicó el subsecretario de Minería, Erich Schnake.
Más allá de ello, el sistema no sería perfecto ya que desde el Ministerio reconocen que esto ha producido la judicialización de los conflicto. “Uno se encuentra que hay titulares que concentran mucha propiedad minera y además, como todo el sistema de concesiones lo otorga el sistema judicial, se judicializan los conflictos por las diferencias que pueden haber entre concesionarios de una misma área y empieza a tener algunos problemas que hacen que deje de ser eficiente el sistema”, señaló Schnake
Otro punto que analizan es el acaparamiento de territorio, lo que produce una baja disponibilidad de superficie para exploración en las principales franjas metalogénicas del país, restringiendo el ingreso de nuevos actores.
“Uno quisiera ver mayor dinamismo, en el sentido de que la propiedad minera está concentrada en muy pocas manos que no están explotando o explorando las concesiones”, indicó.
Y es que si uno analiza las concesiones de exploración, el 45% del total está en manos de 12 actores, siendo SQM el que lidera las concesiones con 12,9% del total. En el caso de las concesiones para exploración, la situación es aún más dramática, ya que el 30% del total está en manos de tres actores: BHP Billiton, que en Chile opera Escondida, Codelco y la minera ligada al grupo Luksic, Antofagasta Minerals (ver gráfico).