El gobierno de Bolivia no tiene planeado expropiar las concesiones otorgadas a empresas mineras extranjeras y, a lo sumo, renegociará los contratos para cumplir con un mandato constitucional. El ministro de Minería, José Pimentel, explicó que “no existe la pretensión” de iniciar un nuevo proceso de nacionalización o expropiación, porque los sindicatos de las empresas mineras privadas oficializaron su rechazo a estas eventuales medidas.”
Fuente: Terra
23/04/2011. El presidente Evo Morales había ofrecido a los principales sindicatos del país “recuperar” las empresas mineras que fueron administradas por el Estado hasta la década del ´90, cuando pasaron a manos de firmas extranjeras.
La canadiense Pan American Silver y la suiza Glencore tienen concesiones mineras en Bolivia, además de la estadounidense Coeur d’Alene y la japonesa Sumitomo. Estas dos últimas desarrollan nuevos proyectos desde el 2000.
Pimentel aclaró que la filial de Coeur, la empresa Manquri, que opera el proyecto argentífero San Bartolomé, “no es precisamente una mina, porque trabaja con los minerales que proveen los cooperativistas”, en áreas del Estado boliviano, consignó la agencia DPA.
El ministro reseñó que el gobierno estuvo “buscando la migración de los contratos de riesgo compartido y de alquiler a contratos de asociación, con mayoría estatal”, una condición establecida en la nueva Constitución vigente desde 2009.
Los sindicatos mineros de las empresas privadas se reunieron con el ministro Pimentel para rechazar la nacionalización, y recibieron las garantías de que estas acciones no se realizarán.
“No se va a tocar lo que es la empresa Minera Manquiri y otras empresas más, que actualmente operan en el país. Eso es lo que a nosotros nos deja en tranquilidad”, dijo a la agencia DPA el dirigente de los trabajadores del Sindicato de Manquiri, David Condori.
Desde que llegó al poder en el 2006, Morales anunció la nacionalización de varias empresas extractivas y ubicadas en sectores estratégicos de la economía. Estos anuncios se lanzaron, usualmente, cada 1 de mayo, en ocasión del Día Internacional del Trabajo.