Fue en junio pasado. Un informe oficial destaca la presencia de metales pesados, como plomo, cobre y zinc, cuya concentración sobrepasa el valor límite establecido de acuerdo a ley. Advierte, además, que el uso de esta agua para fines agrícolas o ganaderos significa un riesgo para la salud de la población.
Ancash – 30/10/2009. Minera Antamina admite que se produjo falla humana en la parte operativa y está consciente de que puede recibir una sanción.
El Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin), la Fiscalía Provincial de Prevención del Delito y en Materia Ambiental de Huaraz y la Segunda Fiscalía Provincial Mixta de Huari vienen investigando el derrame de sedimentos sólidos en el río Carash, en el distrito de San Marcos, provincia de Huari, departamento de Ancash, ocasionado el pasado 13 de junio por parte de la Compañía Minera Antamina
Este hecho motivó el malestar de los pobladores de las comunidades aledañas al río Carash y afluentes, quienes alarmados por el color plomizo de las aguas denunciaron el hecho a la Gerencia de Recursos Naturales y Gestión del Medio Ambiente del Gobierno Regional de Ancash y a los órganos del Ministerio Público. Se tomaron las muestras correspondientes y se enviaron a la Dirección General de Salud Ambiental (DIGESA) para su análisis. Luego de dos meses, DIGESA emitió un informe en el que destaca la presencia de metales pesados, como plomo, cobre y zinc, cuya concentración sobrepasa el valor límite establecido de acuerdo a ley. El informe de DIGESA advierte, además, que el uso de esta agua para fines agrícolas o ganaderos significa un riesgo para la salud de la población. Por su parte, Antamina tomó sus propias muestras y las envió a un laboratorio acreditado en la ciudad de Lima, el cual también informa que los sólidos están elevados.
Poza de sedimentación de minera Antamina
Los representantes de la empresa minera reconocen que sí hubo derrame de sedimentos sólidos en la quebrada Pampamoruna por donde fluyen las aguas que van a parar al río Carash; aducen que la fuga de sedimentos (sólidos en suspensión) se originó producto de una falla humana en la parte operativa, que dichos sedimentos fluyeron por espacio de dos horas y que sólo mataron a cinco truchas de una piscicultura. Luego del accidente ambiental, la empresa trasnacional cerró las válvulas para frenar la fuga de sedimentos; asimismo, efectuó un monitoreo constante por más de dos semanas en todo el trayecto de la quebrada. Descartó cualquier acumulación de sedimentos que pudieran producir efectos futuros e incluso afirmó que el agua ya se había autopurificado. Además, ya está en negociaciones con el propietario de la piscicultura, quien resultó ser un trabajador de la empresa minera, para indemnizarlo por la muerte de las truchas.
Sin embargo, el Fiscal Provincial de Prevención del Delito y en Materia Ambiental de Huaraz, Dr. Carlos Rodríguez Martínez, inició una investigación a petición de la Oficina Defensorial de Ancash. Esta indagación se encuentra en fase preliminar.
“En el caso de encontrar indicadores se formalizará la denuncia penal por el delito de contaminación doloso o culposo”, manifestó el fiscal a Red Verde. Por otro lado, la Segunda Fiscalía Provincial Mixta de Huari, de manera independiente, viene investigando el delito contra la salud pública en agravio de la sociedad por parte de la Compañía Minera Antamina.
Quebrada Pampamoruna
Por su parte, Osinergmin ya inició procedimiento administrativo sancionador en contra de Antamina por fallas operacionales y por haber causado un accidente ambiental. El ente supervisor estipulará una sanción económica que, de acuerdo a la gravedad del incidente, puede oscilar entre 600 y 10,000 UIT (entre 2.13 millones y 35.5 millones de nuevos soles), a lo que la minera podrá apelar.
“Exhorto a la empresa para que mejore su manejo ambiental, todo su sistema de contingencia, emergencias, monitoreo, dando mayor prioridad a la parte ambiental”, detalla el Ing. Erick Mautino, titular de la Gerencia de Recursos Naturales y Gestión del Medio Ambiente del Gobierno Regional de Ancash, entidad que recién después de este incidente ha solicitado a Antamina el estudio de impacto ambiental, el plan de manejo ambiental actualizado, entre otros informes.
En sólo algunos días se conocerá el pronunciamiento de los entes que vienen indagando este hecho, pero la compañía minera Antamina es consciente de que ante esta falla humana tiene que asumir su responsabilidad e incluso pagar la sanción correspondiente, y se espera que se comprometa más en reforzar su sistema de control para evitar un evento similar.