En la capital sanjuanina, mientras se producía la Fiesta Nacional del Sol 2017, asambleas, partidos políticos y colectivos artísticos, se movilizaron bajo la consigna “Con Barrick no hay fiesta” que fue cercada por un fuerte operativo policial. Conversamos con Felipe, de la Asamblea Sanjuanina contra la Contaminación y el Saqueo quien nos contó acerca de los hechos. Recordemos que la empresa es responsable de varios derrames de aguas contaminadas en los ríos sanjuaninos, además de innumerables avasallamiento a los derechos de las comunidades.
Fuente: Tinta Verdei
Como todos los años sucede durante la última semana del mes de febrero la Fiesta Nacional del Sol, que se realiza en la capital de San Juan. Es un festival oficial, organizado por el gobierno de la provincia, donde está presente Barrick Gold, la aurífera de capital canadiense que está a cargo de la operación de los proyectos Veladero y Pascua Lama.
El sábado, asambleas, partidos políticos y colectivos artísticos, se movilizaron bajo la consigna “Con Barrick no hay fiesta”, para dar cuenta de la impunidad que goza la empresa gracias a la complicidad del gobierno.
Felipe, integrante de la Asamblea Sanjuanina contra la Contaminación y el Saqueo, se preguntaba: “¿Cuántos derrames de cianuro más podemos aguantar? La contaminación es más que evidente y la minera trasnacional y el gobierno lo niegan”.
La movilización buscaba expresar con diversas manifestaciones artísticas (música, teatro, murga) la exigencia de la aplicación de la Ley Nacional de Glaciares, la remediación ambiental, el cierre inmediato de Veladero y la renuncia del Ministro de Minería.
Pero esto se vio frenado por el avance de las fuerzas policiales, que impidieron que las personas se movilizaran hacia la puerta del evento.
Infantería se hizo presente para cortarle el paso a los manifestantes, sin permitirles avanzar. Una fuerza desmedida se comenzó a desplegar: policías motorizados con cámaras filmadoras en sus cascos, personal de infantería con tres camionetas y hasta el Secretario de Seguridad Gustavo Fariña quien también estuvo a cargo de la última represión que hubo en el acceso a Veladero, que dejó el saldo de más de 30 detenidos.
Además del cerco policial, hubo forcejeos, la policía le quiso quitar las banderas con consignas a quienes se manifestaban, y si bien esta vez no hubo detenidos, el estado policial dejó su mensaje bien claro: en San Juan no hay libertad de expresión si lo que se pretende es cuestionar la minería a cielo abierto. Cualquier garantía puede ser suspendida en este estado de excepción permanente en San Juan.
El amedrentamiento es una de las estrategias más visitadas por el estado provincial para inhibir las prácticas de sujetos organizados. Sin embargo, la defensa del territorio y del agua, sigue en pie.