Asambleas socioambientales de toda la provincia denunciaron el gasto millonario que representa la “mesa de dialogo” y advirtieron que no fueron escuchadas. Desde el martes, más de 50 exposiciones técnicas iniciaran la segunda etapa del espacio de “dialogo” minero.
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Fuente: La Izquierda Diario
Estarán referidas al ambiente; la economía; la transparencia y control. Inicia así una nueva fase que el gobierno mendocino impulsa para rediscutir la política sobre la minería en la provincia, a pesar del rechazo de las organizaciones socioambientales de Mendoza.
Concluidos los siete primeros encuentros, lo que viene ahora es una segunda parte compuesta por tres semanas, donde se desarrollarán ponencias técnicas sobre cada uno de los temas consensuados entre el gobierno y los empresarios.
Según indicaron desde el Ministerio de Economía, las actividades incluirán además un viaje a San Juan “para enriquecer los debates”, en un intercambio con asambleístas; la interiorización con la situación de la minería en esa provincia y la visita a la mina Gualcamayo, uno de los yacimientos de extracción de oro más importantes del departamento de Jáchal.
El subsecretario de Energía y Minería, Emilio Guiñazú, explicó que “el objetivo es ir a charlar con los asambleístas del agua de Jáchal para saber cómo los ha afectado la situación del derrame de la Barrick y la minería en general como comunidad”.
La situación en Jáchal es bien conocida. El domingo 13 de septiembre de 2015, se produjo la rotura de un caño por el cual fluía la solución cianurada utilizada por la multinacional Barrick Gold en el proceso para separar metales de roca, conocido como lixiviación. Esto generó que más de 1 millón de litros se derramaran cerca del Río Potrerillos en Iglesia-San Juan, cuyas aguas terminan desembocando en el Río Jáchal.
Esta situación puso en evidencia los límites del desarrollo minero en esa provincia y los riesgos que implica para la población. A pesar de los esfuerzos del entonces gobernador de San Juan, Jose Luis Gioja, por evitar mayor trascendencia respecto a este desastre ambiental, pocos meses después se conocieron las denuncias sobre el primer caso de contaminación en humanos. Los habitantes de Jáchal se movilizaron, bloquearon el ingreso a la mina de Veladero y denunciaron que el “progreso” prometido nunca llegó. En sus movilizaciones recibieron el apoyo de legisdores de Mendoza, como Noelia Barbeito .
Este intento de “interiorizarse” sobre los alcances de la minería, por parte del gobierno de Mendoza, no puede leerse por fuera de los intereses nacionales. Días pasados, el gobierno de Macri envió a la provincia al Secretario de Desarrollo Minero Mario Capello, el funcionario que es considerado un “lobbista” de Barrick Gold por las organizaciones socioambientales, para presionar sobre la decisión de avanzar firmemente con la extracción minera, pese al gran rechazo social que existe.
Las Asambleas por el Agua Pura de Mendoza entregaron al gobierno un documento, en el que anunciaron su retiro de la mesa de diálogo minero por considerar que no son escuchados. Luego de participar de la primera reunión propuesta por el gobierno de Alfredo Cornejo, las asambleas decidieron, tras un encuentro realizado en Gral Alvear, no seguir involucrándose en lo que consideran “una farsa” para que las organizaciones ambientalistas acepten el avance minero, hoy regulado por la ley provincial 7722.
Carina, de la Asamblea de Tupungato, en dialogó con La Izquierda Diario comentó “la lucha sigue, nosotros no vamos a seguir participando de este monólogo mal que le pese al Subsecretario de Energía y Minería. Vamos a seguir reuniéndonos todas las asambleas de Mendoza para discutir medidas de lucha contra este modelo de despojo y contaminación que el gobierno de Cambiemos quiere imponer”.
A mediados de septiembre, el gobierno de Cornejo pretende realizar una jornada intermedia en el departamento de General Alvear, donde sus habitantes se oponen férreamente a este tipo de emprendimientos.
