El otorgamiento de becas de estudio en la localidad de Perito Moreno, Santa Cruz, nos permite analizar  algunas prácticas de las empresas mineras.

Hace unos días, se comentaba en los medios santacruceños que la empresa minera Newmont Goldcorp  pagaría en julio becas adeudadas con montos retroactivos desde marzo a junio a estudiantes de la localidad de Perito Moreno, Santa Cruz, que no las habían recibido en este año.

“Estamos felices de la vida y queríamos agradecer la oportunidad que nos dieron en los medios para difundir esta situación y esta noticia triste de Perito Moreno”, indicaron los papás al hacer pública la situación del no cobro de las becas.  “Solo nos queda esperar a julio, cuando la empresa haría efectivo este pago” según informa El Diario Nuevo Día que tituló la noticia como: “Hubo acuerdo y la minera Newmont Goldcorp pagará las becas a los estudiantes de Perito Moreno”,  aclarando luego que se trataba de un acuerdo entre papás, ediles de la localidad y autoridades de la empresa.

Y para comprender la dinámica de esta operatoria, escuchamos los testimonios de las familias disponibles aquí. 

De qué se trata el “aporte” de las mineras

El Concejo Deliberante de Perito Moreno tiene un convenio con el sector minero a través del cual 109 estudiantes reciben $11.000 en concepto de beca de estudio. Tres mineras hacen ese aporte: 50 becas son de Newmont, 50 de Patagonia Gold y el resto de Santa Cruz.

Algunas de las becas a cargo de Newmont iban a ser dadas de baja  a partir de la venta/traspaso de Gold Corp a Newmont y el cambio de condiciones que Newmont estableció  para recibir la beca.

El proyecto de becas funciona desde hace años y se rige con normas establecidas por el Concejo Deliberante de la localidad. Se enmarca además en proyectos de Responsabilidad Social Empresarial.

Para pensar…

Sabemos de la crisis económica en Argentina, una crisis estructural que el desmanejo político y el contexto mundial tienden a profundizar. Pero la estampa de la dinámica social, política y económica que muestra la localidad de Perito Moreno pone en primer plano una realidad que, quizás de tan obvia, puede pasar inadvertida.

Nos preguntamos por qué después de tantos años de explotación minera metalífera en Perito Moreno hay familias que siguen necesitando becas de estudio para sus hijos, por ejemplo.  Al parecer la megaminería NO estaría resolviendo per sé el aspecto económico de una región ¿verdad?

Nos preguntamos también, de qué “bolsillo” finalmente sale el dinero de esas becas, porque los programas de RSE representan beneficios tributarios para las empresas ya que los montos que “aportan” les son descontados de sus impuestos (que son prácticamente nulos en nuestro país para las empresas mineras).

Por último, nos preocupa que el otorgamiento de becas esté sujeto al cumplimiento de ciertos criterios  meritocráticos –ya sea que los establece el Estado Municipal o los establecen las Empresas- cuando en nuestro país la educación es un derecho universal  que además debe pensarse en términos de “continuidades” porque las mineras se retirarán del territorio una vez que lo hayan saqueado.

En síntesis, vemos aquí un muy claro ejemplo de lo que sucede cuando hay corrimiento estatal para asumir obligaciones: las empresas generan un nicho para presentar lo que parece ser un beneficio a la comunidad y, aunque tal vez lo sea en forma parcial y temporal, resulta finalmente en beneficios para el sector corporativo: lavado de imagen y favores tributarios.

La Educación Pública debe ser garantizada por el Estado y mantenerse independiente de las corporaciones.