El subsecretario de Desarrollo Minero, Mario Capello, afirmó que ninguna actividad por sí sola va a salvar a Chubut, y que es necesario el desarrollo de todas las actividades productivas. Si bien mencionó al petróleo, la pesca y el turismo, también valoró particularmente la posibilidad de aumentar la producción de carne ovina y bovina del sur del paralelo 42 para exportación. Lo contradictorio es que la calidad de la carne se debe no sólo a la ausencia de aftosa sino también de metales pesados, que representan el mayor riesgo de contaminación de los proyectos mineros a gran escala. En este marco de situación planteada y con los detalles descriptos de los escasos beneficios económicos reales de la minería para la provincia, los vecinos de la Asamblea pensamos que se debería expandir  la matriz productiva sin incluir actividades contaminantes.

Fuente: Diario El Chubut

El miércoles pasado, el subsecretario de Desarrollo Minero, Mario Capello, junto con el coordinador del Ministerio de Producción de la Nación, Mariano Lamothe, recibieron en Buenos Aires a los intendentes de la Meseta chubutense, encabezados por Mario Pichiñán, con quienes acordaron retomar los lineamientos de la cumbre minera en Telsen.

Previamente, se realizó una entrevista a Mario Capello y, en diálogo con periodistas  sobre los alcances de las políticas mineras en Chubut, afirmó que «ninguna actividad» por sí sola «va a salvar» a la provincia de la crisis económica,  comentó que «lo he escuchado al Gobernador decir que Chubut necesita más y mejor petróleo, agregar valor a la pesca y más y mejor turismo», compartiendo la preocupación de Arcioni por generar más y mejores ingresos; y consideró que la minería, en particular el Proyecto Navidad, podría potenciar la demanda de otras formas de producción basado en que la generación de empleos directos e indirectos requeriría demandas en otras actividades.

Las regalías del Proyecto Navidad serían de 10 millones de dólares anuales. Analizando éstos valores podemos concluir que sólo representan el 0,88 % de los salarios de los empleados provinciales del presupuesto del año 2018 que corresponde a 33.900 millones de pesos. Además, puso reparos en la posibilidad de incrementar las regalías al entender que podría retrasar las inversiones debido a la competitividad con otros países y que «debido al valor exportable de la plata en Navidad o el uranio, hoy en día entre el 75 y 80 por ciento es lo que se gasta para extraerlo, y quedaría ese importe mayoritariamente en Chubut», concluyó.

Uno de los temas más cuestionables es que mencionó que el Proyecto Navidad implicará acuerdos importantes en materia de desarrollo energético, obras de infraestructura, salud y educación para las localidades de la meseta; pero no aclaró que parte de los acuerdos tienen que ver con los aportes que forman parte de las acciones conocidas como Responsabilidad Social Empresarial (una suerte de asistencialismo minero) y la posibilidad de energía eléctrica para la meseta es una obra que estará a cargo del gobierno como lo establece el Nuevo Pacto Federal Minero. El mencionado pacto acuerda que el gobierno está obligado a desarrollar toda la infraestructura necesaria para el desarrollo productivo minero a través del Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda y dispondría de fondos para ese fin. La energía eléctrica que se necesitaría, provendría del interconectado nacional de la línea de alta tensión que atraviesa la provincia desde la Presa Hidroeléctrica Futaleufú hasta la planta de Aluar en Puerto Madryn. De la mencionada línea, los habitantes de la meseta vieron sus inmensas torres de 330 KV sin que ningún gobierno provincial en estos 40 años haya tomado la decisión de hacer una “apertura” en El Escorial para abastecer de electricidad a todas las comunidades. Lo mismo ocurre con las vías de comunicación como los caminos, ya que el estado está obligado a proveerlos. Sin embargo, ese gasto del estado impensado para los pobladores de la meseta, están dispuestos a hacerlo para las empresas mineras.

Estos “espejitos de colores” sobre infraestructura y desarrollo se contradicen con la situación actual nacional, en la que se ha decidido una disminución de la obra pública y el cierre de escuelas terciarias y universidades.

Al mismo tiempo, Capello reparó que en Chubut se necesitan desarrollar otras actividades en sintonía con las políticas nacionales como poner en marcha los parques industriales y mejorar el salario de los trabajadores. “La Argentina firmó un acuerdo con Japón para la entrada de carne ovina y bovina proveniente del sur del Paralelo 42 . Santa Cruz y Chubut tendrán que mejorar la producción y ser proveedores, porque el mundo requiere de la carne y necesita más demanda», expuso el funcionario. Sin embargo, lo contradictorio de sus expresiones es que, la calidad de la carne, se debe no sólo a la ausencia de aftosa sino también de metales pesados que representan el mayor riesgo de contaminación en el caso de habilitarse proyectos mineros a gran escala en la zona de cría de los animales.

Mario Capello expuso también el interés por producir uranio extrayéndolo de las minas existentes en la provincia para uso propio en las centrales nucleares y para exportación, en lugar de importarlo de Kazajistán y Canadá. Esta afirmación se hace en un contexto en el cual, muchos países están reemplazando la energía nuclear posteriormente al accidente de la central de Fukushima, como es el caso de Alemania.

En cuanto a las regalías mineras, Capello consideró que eran adecuadas debido a que el 10% de las mismas, unos 30 millones de pesos se destinarían para controles ambientales bajo las condiciones que disponga la provincia. «En Chubut no solo desde el Estado, también las universidades y la población local podrían controlar que se realice la minería dentro de los parámetros ambientales que el Estado provincial le va a poner como exigencia», indicó. Estas afirmaciones aparte de irrealizables, representan una absoluta fantasía si se sugiere que serviría para disminuir riesgos de contaminación, particularmente porque la Ley de Protección Ambiental para la Actividad Minera Nro 24585 es resarcitoria (se repara el daño a través de una indemnización) y según el art. 19 inc. e) se produce el cierre del emprendimiento ante la reincidencia de 3 daños graves al ambiente.

A ciencia cierta, se desconoce realmente el costo de la actividad minera, es de suponer que las empresas querrán venir a países con más incentivos fiscales. Nuestra conclusión es que si es imprescindible aumentar la matriz productiva para el desarrollo de Chubut, que algunas de las actividades posibles como la ganadería se perjudicarían ante la presencia de metales pesados o drenaje ácido en la zona generados por la megaminería, que contamos con el acuífero Sacanana de grandes dimensiones y la energía eléctrica para la meseta depende de una obra del estado, ¿para qué desarrollar minería contaminante?.