La semana pasada, el intendente Trelew, Máximo Pérez Catán realizó unas deplorables declaraciones en una radio de esa ciudad. Las asambleas y foros socio-ambientales de todo Chubut le respondan con esta carta abierta que “Debemos aclararle que hemos tenido los testículos que nos reclama pero también ovarios porque son muchas las mujeres que ponen el cuerpo en la defensa del agua y de los ecosistemas. No es solo cosa de machos, señor intendente. El No a la Mina es el rechazo social a un sistema extractivo para extraer minerales de baja concentración que denominamos megaminería. No se trata de saber si necesitamos minería o no. Se trata de reflexionar sobre cuántos y qué minerales extraer, de qué manera, para qué, para quién.”
Por Unión de Asambleas Ciudadanas de Chubut (UAC-CH)
CARTA ABIERTA AL INTENDENTE DE TRELEW MÁXIMO PÉREZ CATÁN
Sus recientes y provocadoras declaraciones nos hacen reflexionar una vez más sobre la calidad humana e institucional de quien maneja los designios de la ciudad de Trelew. Refiriéndose a nosotros con la chabacanería que lo caracteriza no hace más que demostrar su falta de argumentos para rebatirnos, poniéndose a la altura de los más lamentables exponentes de la dirigencia política de este país.
De sus palabras advertimos el tremendo desprecio e ignorancia que tiene por uno de los más importantes movimientos sociales de la historia de nuestra provincia. 11 años pasaron del plebiscito de Esquel que impulsó la pionera ley 5001, sancionada por la legislatura provincial, que prohíbe la actividad que usted anhela con tanto fervor.
Durante todos estos años el movimiento asambleario colectó un conjunto de saberes que son referencia a nivel nacional y latinoamericano. Nutridos por el aporte de prestigiosos profesionales, entre los que destacan geólogos, hidrogeólogos, abogados, limnólogos, economistas, docentes, químicos, periodistas, entre otros; sumado a la información y experiencia recabada de los emprendimientos en marcha en Argentina y Latinoamérica ratifican lo que venimos sosteniendo todos estos años: por donde pasa la megaminería crece la miseria, los territorios se destruyen, contaminan, y aparecen las enfermedades relacionadas con esta práctica de enclave extractivista que nada tiene que ver con un real desarrollo de las poblaciones.
Sorprende que en el horizonte productivo de Trelew no vea otra cosa que minería de gran escala. Al menos años anteriores funcionarios de su laya arengaban por la reactivación del parque industrial, por el polo lanero y por un valle productivo. Ahora, Ud. decretó la muerte de esas actividades sosteniendo falazmente que no hay otra salida que la megaminería. Con intriga nos preguntamos qué será lo que lo apura tanto. De otro modo no podemos explicarnos cómo pudo haber impulsado una declaración en el concejo deliberante expresando que vería con agrado la instalación de una actividad prohibida.
Pero, ¿qué podíamos esperar de quien en su cuna política fue parte de la fiesta menemista de la “pizza y el champagne” que rifó nuestro país? ¿Qué más podíamos esperar de un intendente que propone como proyecto de “modernidad” expropiar el terreno de la universidad pública y gratuita para construir en su lugar estacionamientos o un hotel privado?
Debemos aclararle que hemos tenido los testículos que nos reclama pero también ovarios porque son muchas las mujeres que ponen el cuerpo en la defensa del agua y de los ecosistemas. No es solo cosa de machos señor intendente. Ud. dijo: “(…) yo no veo que el polo antiminero de Chubut tenga los huevos de irse a Comodoro Rivadavia a plantarse en la plaza de Comodoro Rivadavia a decir que la explotación de petróleo está perjudicando el medio ambiente (…)”
Sr Pérez Catán, para su tranquilidad eso es exactamente lo que hicimos en muchas oportunidades. En el encuentro de la UAC-CH de abril de 2013 ciudadanos de toda la provincia nos instalamos precisamente en la PLAZA del “Museo Ferroportuario” en pleno centro de la ciudad del petróleo, repartimos volantes e informamos a la población de los desastres de la megaminería, la contaminación petrolera y la nueva y amenazante técnica conocida como “fractura hidráulica”. Le recomendamos que mire esta información en el Diario El Patagónico, donde encontrará detalles del encuentro que culminó con una importante marcha por las principales arterias de la ciudad. Consecuentes con ese encuentro de abril y articulados en el nivel regional, volvimos a Comodoro Rivadavia para celebrar la 7ma UAP (Unión de Asambleas Patagónicas) los días 21 y 22 de junio. Somos un movimiento organizado y entendimos que uno de los frentes en el que debíamos estar muy presentes por la fuerte ofensiva megaminera-frackinera era, y es justamente, Comodoro Rivadavia, pues debe quedarle bien claro, Sr. Pérez Catán, que allí donde estamos, estamos por conciencia, estrategia y organización del movimiento (Declaración de la 7ma UAP). Además fue en la ciudad petrolera donde nació el Foro Ambiental y Social de la Patagonia en 2008, que ahora tiene sedes en Trelew y Puerto Madryn. Institucionalmente uno de los logros más importantes de la lucha contra la megaminería se dio en el rectorado de la Universidad Nacional de la Patagonia, precisamente en Comodoro Rivadavia. Allí se produjo el rechazo a los fondos provenientes de Minera Alumbrera que por ley llegan a las universidades. La UNPSJB rechazó “todo dinero, subsidio, beca o donación que provenga de emprendimientos de megaminería” y en sus considerandos pide a la comisión “la difusión de las graves consecuencias que genera la megaminería”. En este sentido, también el Consejo Directivo de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales, de la UNPSJB, en su sesión de octubre de 2012, en Comodoro Rivadavia, aprobó un pronunciamiento de rechazo al “marco regulatorio de la actividad minera” impulsado por el gobierno de la provincia del Chubut. Fueron también miembros de asambleas por el No a la Mina y comunidades de Pueblos Originarios las que presentaron denuncias judiciales y un amparo ambiental que frenó la primera perforación de YPF con la peligrosa técnica de extracción petrolera llamada fractura hidráulica o fracking en Comodoro Rivadavia.
Alertamos el peligroso tono de sus declaraciones, que sólo sirven para alimentar el enfrentamiento entre ciudadanos. Corresponde a Ud. -dado el cargo institucional que ostenta- ser el garante de la paz social y no un instigador de violencias ni regionalismos insensatos. Recuerde, Sr. Intendente, que en noviembre de 2012 patotas pro-mineras ejercieron una salvaje violencia contra hombres, mujeres y niños en la legislatura provincial que culminaron con una decena de heridos. Fueron estos aberrantes hechos los que provocaron la indignación de la sociedad y una movilización histórica de miles de personas en la capital provincial que hicieron caer definitivamente el “marco regulatorio minero” que pretendía habilitar la megaminería. Las víctimas aún esperan justicia. El 19 de septiembre de 2012, también en la legislatura provincial, patotas petroleras desalojaron a miembros de las asambleas que rechazaban la firma del contrato con Tecpetrol para extender concesiones y habilitar el fracking. La agresividad de las fuerzas de choque de los intereses petroleros obligaron a los asambleístas presentes a refugiarse en el Superior Tribunal de Justicia en resguardo de su seguridad y en defensa de los derechos constitucionales vulnerados.(Legislatura de Chubut: “El contrato con Tecpetrol se firmó con violencia y represión”)
Cuando Ud dice que “el no a la mina significa abandonar la vida moderna, significa volver a la edad de piedra” nos damos cuenta de que no ha entendido nada, o que nada quiere entender. El No a la Mina es el rechazo social a un sistema extractivo para extraer minerales de baja concentración que denominamos megaminería, también llamada minería hidroquímica metalífera a cielo abierto. Hasta un niño sabe que las cosas que nos rodean provienen de algún tipo de minería, no peque de infantil, señor intendente. No se trata de saber si necesitamos minería o no. Se trata de reflexionar sobre cuántos y qué minerales extraer, de qué manera, para qué, para quién. Oponerse a que nos envenenen con los químicos tóxicos de la lixiviación, a que nos destruyan territorios y ecosistemas, y que además nos saqueen con una legislación escandalosamente entreguista -eso que los lacayos de las corporaciones mineras llaman “progreso” y “modernidad”- no es pretender volver a la edad de piedra, sino todo lo contrario. Más bien es buscar modelos alternativos de desarrollo y de progreso humano que nos permitan vivir en armonía con el entorno sin arrebatarles el futuro a nuestros hijos.
Para finalizar, le recordamos que el diputado nacional Mario Das Neves -líder del espacio político al que Ud. pertenece- se declaró recientemente “absolutamente en contra de la megaminería a cielo abierto” Una de dos: o en ese espacio son muy versátiles, o muy mentirosos. El tiempo tendrá la respuesta. Entrevista completa a Marios Das Neves
Unión de Asambleas Ciudadanas de Chubut (UAC-CH)
29 de marzo de 2014