El obispo de Neuquén, Virginio Bressanelli, puso en marcha este viernes una campaña de fuerte crítica a la explotación no convencional de hidrocarburos, al cuestionar el cuidado del ambiente de gobiernos y empresas, por la sencilla razón de que “no son creíbles”.

Fuente: Observatorio Petrolero Sur OPSur
“La palabra creíble lamentablemente no es la del gobierno, ni de las operadoras porque son partes interesadas y porque la historia demuestra que a veces hay cambios de discursos, y que ha habido problemas de contaminación”, dijo, con toda la contundencia de las palabras, el obispo de Neuquén.

Bressanelli dio a conocer una cartilla con un contenido didáctico sobre la explotación no convencional de hidrocarburos, y específicamente, la técnica de la fractura hidráulica o fracking, en una conferencia de prensa en la que fue acompañado por el sacerdote Rubén Capitanio, párroco de Centenario.

“Yo no digo que no nos digan la verdad, pero la credibilidad la dan los hechos. La credibilidad habrá que descubrirla por otro camino, de por sí deberían ser las universidades, pero a veces las universidades vienen subvencionadas por las mismas mineras y no tienen toda la libertad de expresión e intelectual para presentar las cosas como son”, sentenció, de manera ciertamente inquietante, el Obispo.

Bressanelli se cuidó en aclarar que la postura del obispado no es contra el gobierno de Jorge Sapag, pero que no podía menos que hacer lo que expresó este viernes, so pena de “traicionar al pueblo”.

“Para nosotros el cuidado del medio ambiente es parte del cuidado de la vida, y la vida es fundamental. Así como cuidamos la vida de las personas tenemos que cuidar la vida del ambiente, que es la casa de todos”, dijo.