Autoridades agrarias y municipales de los distritos de Ocotlán y Ejutla exigieron que se cancele el proyecto minero de la empresa Fortuna Silver Mines, así como se respeten las tierras de las comunidades zapotecas que han declarado sus territorios prohibidos para actividades extractivas.
Fuente: Proceso
De igual forma, culparon a la Semarnat, Conagua y Profepa por incumplir con sus responsabilidades, al permitir daños ambientales generados por el proyecto minero San José de las empresas mineras Cuzcatlán y Fortuna Silver Mines.
Además, advirtieron que la presa de jales es una amenaza muy grave de contaminación para las comunidades, ya que con las últimas lluvias ha estado en su máxima capacidad y, en caso de desbordarse, afectará sus tierras de cultivo.
Los inconformes exigieron que la empresa Fortuna Silver Mines respete las tierras de las comunidades, mismas que han declarado sus territorios prohibidos para la minería, principalmente los límites ejidales de Magdalena Ocotlán, San Matías Chilazoa, Monte del Toro y San Martín de los Cansecos.
También pidieron a estos empresarios dejen de hacer excavaciones irregulares para sus intenciones de expansión, además de que el gobierno respete su decisión.
Insistieron en que la Secretaría de Economía cancele las concesiones mineras otorgadas en sus territorios, ya que aquéllas no cuentan con la aprobación de las asambleas comunitarias y por lo tanto vulneran su derecho a la libre determinación y al territorio.
“Solicitamos la inmediata intervención de las autoridades correspondientes para evitar que la empresa minera continúe invadiendo el territorio de San Martín de los Cansecos, y exigimos a la Profepa agilizar el procedimiento administrativo derivado de la denuncia popular, pues de no haber respuesta de las autoridades, se violentarán nuestros derechos reconocidos constitucionalmente”, puntualizaron.
Igual reiteraron que seguirán organizándose para la defensa de sus bienes comunes en la región, ya que “nuestros territorios no están en venta y aquí decimos sí a la vida, no a la minería”.
Las autoridades agrarias y municipales, así como la Coordinadora de Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán, se quejaron de que la minera Fortuna Silver Mines (FSM), instalada en San José del Progreso, de manera constante ha emanado grandes cantidades de humo negro y contaminantes que afectan a las comunidades de la región.
Además, FSM realiza trabajos de excavación en los límites de San José del Progreso afectando las tierras del ejido de San Martín de los Cansecos.
Apenas el 30 de junio realizaron un recorrido en los límites del ejido de San Martín de los Cansecos con San José del Progreso, donde se percataron que particulares han arrojado escombros y restos de los trabajos de exploración realizados por Cuzcatlán-FSM en sus límites ejidales.
Además, abrieron brechas y realizaron diversas excavaciones sin la autorización de la comunidad, violentando los acuerdos de asamblea, donde se aprobó prohibir cualquier trabajo de exploración o explotación minera, acciones que han sido documentadas ante el Registro Agrario Nacional.
Lo que es peor, observaron, es que “la empresa ha instalado casetas de vigilancia en los límites agrarios, las cuales son vigiladas por personas de la comunidad de San José del Progreso contratadas por la minera Cuzcatlán-FSM, quienes se acercaron hacia nosotros con una actitud intimidatoria”.
Estos hechos ya fueron denunciados ante las autoridades competentes y hasta el momento no han tenido una respuesta satisfactoria, por tal motivo continuarán exigiendo a las autoridades prohíban dichos estudios, que forman parte de la expansión del proyecto minero en la zona.