Pobladores del Coro Coro rechazaron hoy la inauguración de la planta hidrometalúrgica de cobre, porque -según dicen- el Gobierno no cumplió con las normas medio ambientales establecidas para este tipo de infraestructura minera.
Fuentes: diarioa La Razón y La Prensa
28/10/2009. Los comunarios llegaron hoy hasta el Parlamento para plantear sus denuncias a la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados, liderados por el representante del Consejo de Gobierno del El Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (CONAMAQ) Rafael Quispe Flores.
“No estamos de acuerdo a que se inaugure la planta porque no se ha cumplido con las normas establecidas, nosotros como pueblo indígena tenemos el derecho a la consulta libre, previa y formal”, dijo Quispe Flores.
No obstante, el presidente Evo Morales inauguró, este martes, la planta hidrometalúrgica de cobre electrolítico, con una inversión de 18 millones de dólares en medio de un masivo acto.
La Planta tiene previsto procesar 600 toneladas de cobre concentrado por año, lo que significa una producción de 3.500 toneladas de cobre electrolítico que con el apoyo de la firma sur coreana Kores puede llegar a producir seis veces más.
Quispe Flores, explicó que el proyecto hidrometalúrgico de cobre no cuenta con el estudio de evaluación respectivo, no existe la ficha ambiental, no hay un plan de mitigación. Por lo tanto “viola los preceptos constitucionales y no vamos a permitir que la planta entre en funcionamiento hasta que no cumpla con la Ley”, agregó.
El dirigente de la comunidad de Coro Coro, situada a 120 kilómetros de La Paz, provincia Pacajes, advirtió que el funcionamiento de la planta pondría en riesgo por lo menos 10 comunidades agrícolas campesinas, toda vez que los residuos mineros y desechos contaminan no sólo el medio ambiente, sino pondrían en riesgo la salud de las personas.
“Hay animales ovinos particularmente que mueren por el consumo de agua y pastos contaminados, hay animales que nacen con dos patas. Son dos años que van y que la contaminación ha empezado, también a muchos niños les han detectado niveles de plomo n la sangre”, denunció.
Ante estos efectos los comunarios organizaron una comisión de estudios de impactos y daños medio ambientales en coordinación con la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) para establecer científicamente los niveles de contaminación en el medio ambiente y que incluya animales, plantas y personas.
Detalles de las inversiones y procesos
El Evo Morales informó durante la inaguración de la planta metalúrgica, que se tiene un contrato de riesgo compartido (joint venture) con la empresa de capitales coreanos Kores, que está en la primera fase de exploración y que podría llegar a invertir, en 2014, hasta 200 millones de dólares en la construcción de una planta que procese hasta 50.000 toneladas métricas al año.
Se trata de la exploración y prueba piloto/leaching SX-EW y un estudio de factibilidad sobre el yacimiento del Cerro Viscachani, del cual originalmente se extraía cobre y cuyos desmontes alimentan la planta operada por Comibol.
Una vez superada la primera fase y de confirmarse sus reservas, la segunda consistirá en el trabajo a cielo abierto en el yacimiento.
En declaración a La Prensa, el presidente de Kores, Shin Jong Kim, confirmó, traductora mediante, que el plan de esa empresa prevé una inversión el año 2010 de diez millones de dólares en prospección y, si el resultado es positivo, entonces invertirá los 200 millones de dólares ya citados.
El ejecutivo de Kores dijo que se establecerá cuánto cobre se producirá a partir del trabajo de prospección minera.
Kim destacó que el proyecto lo realizan únicamente con su inversión, sin que intervengan recursos estatales.
Para el empresario coreano, la expectativa es “grande”, porque se cree que “hay abundante cobre” en esa zona en exploración que forma parte de la cordillera de Los Andes. Esas declaraciones fueron reforzadas por la presencia en el acto del embajador de Corea en Bolivia, Hong-rak Kim, y del representante especial del Gobierno de ese país asiático.
El director de Minería, Freddy Beltrán, sostuvo que la inversión de Kores es a fondo perdido, pero de tener éxito en las operaciones Bolivia participará de las ganancias netas en el orden del 55 por ciento, por tratarse de un contrato de riesgo compartido.
Las autoridades de Minería pusieron de relieve que, con la puesta en marcha de la planta de Lequelele, el país deja de exportar mineral en bruto e ingresa en una primera fase de industrialización con la obtención de los cátodos de cobre.
En el acto de inauguración se anunció que se instalarán dos plantas más, en Potosí y Oruro, para complejos de zinc y plata.