Santa Cruz, Argentina – 22/03/09. El ministro de Planificación Federal anunció que “en el corto plazo vamos a estar produciendo este mineral estratégico” para el país. Una ley apoyada por la por Cristina Fernandez de Kirchner en 1991, cuando era diputada provincial, prohíbe la producción, el depósito y el transporte de “elementos que pudieren producir contaminación radioactiva”. Entre tanto, mineras de uranio avanzan en la creación de una cámara sectorial en el país. Integrarían Wealth Minerals, Strategic Resources, Globe Uranium y Megauranium.
Fuentes: diarios Crítica de la Argentina y Ciudadano
Las Heras: y ahora vienen por el uranio

A la izquierda, presidenta Cristina Fernandez de Kirchner, a su lado el ministro Julio De Vido En Santa Cruz rige la ley provincial 2.249, apoyada por Cristina Fernández cuando era diputada en 1991, que prohíbe la explotación de residuos radiactivos que pudieran dañar el medio ambiente. (Télam)

“En el corto plazo vamos a estar también produciendo uranio, un mineral estratégico para la Argentina, que está llevando adelante integralmente su programa de desarrollo nuclear y necesita uranio producido en el país”, sostuvo el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, durante la inauguración de la planta de procesamiento de oro y plata de Minera Triton Argentina, en Manantial Espejo, en el centro de la provincia de Santa Cruz.

El anuncio pasó inadvertido en medio de tanta euforia oficial por el nuevo emprendimiento mineral que se ponía en marcha, gracias “al crecimiento de la actividad minera en Santa Cruz que concentra el 42% de las inversiones que se están realizando en el país”, según De Vido.

Lo cierto es que en Santa Cruz rige la ley provincial 2249 de junio de 1991, promulgada en julio del mismo año por decreto 1324 que en su artículo 1 establece: “Prohíbese en todo el Territorio de la Provincia la instalación de centrales nucleares, depósitos transitorios o permanentes de residuos radioactivos, plantas o establecimientos de cualquier tipo que elaboren o utilicen durante el proceso de producción, elementos que pudieren producir contaminación radioactiva”. En su artículo 2, la normativa también impide “la circulación o transporte por cualquier medio, de residuos radioactivos provenientes de combustible nuclear, de centrales nucleares o de plantas de procesamiento”.

Por aquellos años la actual mandataria Cristina Fernández de Kirchner, en su carácter de diputada provincial del Frente para la Victoria santacruceño, apoyó con su voto aquella iniciativa impulsada por el oficialismo, por lo que el anuncio del ministro De Vido despierta dudas respecto a si se trató de un olvido del funcionario o el gobierno está pensando en modificar la legislación vigente.

De Vido precisó que la explotación de uranio se realizará “en Laguna Sirven, cerca de la localidad de Las Heras” –a unos 60 kilómetros- en el marco de un convenio con la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) que contempla la exploración en otras áreas de la provincia.

No es la primera contradicción, omisión u olvido que sobre la materia demuestran los funcionarios de Santa Cruz. En noviembre pasado, el diputado nacional kirchnerista José Manuel Córdoba presentó el Proyecto de Resolución Nro 6485-D-2008 que expresaba “solicitar al Poder Ejecutivo, considerar la pertinencia de incluir la cuenca inferior del Río Santa Cruz como potencial localización para las próximas instalaciones de generación eléctrica de fuente nuclear, que requerirá el país y que deben planificarse con suficiente anticipación”.

En otros tiempos, como lo demuestra la resolución 047/96, el entonces diputado provincial y actual Secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini, expresaba: “…Nuestro objetivo era oponernos –tal como se expresa en el proyecto- a la instalación del repositorio nuclear en Gastre. También queríamos que se aludiera a la totalidad de la Patagonia, como un lugar que queremos preservar ecológicamente apto para actividades que preserven el medio ambiente y no solamente para aquellas que puedan agredirlo…”.

Quieren crear una cámara para las mineras que extraen uranio
Frente a la carga de grupos ambientalistas, las firmas vinculadas a ese metal intentan mejorar su imagen.

Fuente: diario Ciudadano
Pese a los avatares de la crisis financiera y al revés judicial que recibió el proyecto de reapertura de Sierra Pintada, el mercado local del uranio parece mantener intacto su atractivo para la inversión. De hecho, varias compañías que fijaron su mirada en el potencial que posee Mendoza (por ahora solo centrado en el yacimiento de Malargüe) con este mineral decidieron constituir un ente que las identifique de manera específica y defienda sus intereses.

Esto lo confirmó la directora de Desarrollo Estratégico de Energía Mineral, subsidiaria de la canadiense Calypso Uranium, Larissa Pergat (1), quien afirmó que actualmente hay charlas para avanzar con la creación de una cámara sectorial. “Aún faltan definir ciertos detalles, pero anhelamos que la iniciativa se concrete en el transcurso de este año. En ese sentido, estamos esperando que se sumen todas las compañías del segmento”, adelantó. Entre las empresas que integrarían la cámara estaría Wealth Minerals, Strategic Resources, Globe Uranium y Megauranium.

Según sus palabras, la propuesta tiene como meta objetivo trabajar conjuntamente para mejorar el posicionamiento de la minería uranífera. “Muchas mineras del sector se encuentran emplazadas en zonas distantes entre sí, por lo que contar con una cámara que nos agrupe sería un buen modo de facilitar nuestra comunicación. Asimismo, también se apuntaría a concentrar esfuerzos junto con la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y otros organismos que regulan la actividad para difundir correctamente todo lo referido a su desarrollo”, puntualiza Pergat.

Por otra parte, esta iniciativa va de la mano del intento de reactivar la actividad en todo el país. “El interés por el uranio está resurgiendo no sólo en la Argentina, sino en todo el mundo. Con los vaivenes del precio del petróleo y la escasez de gas, el planeta se plantea otras posibilidades. Hay que buscar energías seguras y el uranio es un recurso. No produce efecto invernadero y es aceptable para generar electricidad”, explica Aníbal Núñez, gerente del Proyecto de Restitución Ambiental de la Minería del Uranio (PRAMU) de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA). Según Núñez, “hay una interpretación de la opinión pública que donde hubo uranio hay problemas, y no es así”.

Aunque hoy no hay minería de uranio en actividad en el país, la hubo hasta los 90. El gobierno menemista la frenó porque costaba más extraer uranio que importarlo. “El precio del uranio costaba US$ 180 el kilo en 2007, y se estima que podría alcanzar los US$ 500 en 2009”, expresó Fernando Lisse, un especialista en la materia y asesor en el Congreso de la Nación.

“Si no se modifica eso, corremos el riesgo de que, a pesar de ser un país con uranio, tengamos que salir a comprarlo. Hoy se importa, mientras hay un puñado de empresas extranjeras importantes, canadienses, británicas y australianas, que quieren llevarse el uranio para satisfacer sus demandas. Lo extraen en bruto y le ponen el valor agregado en sus países de origen, que es ahí donde está el riesgo de contaminación”, concluyó Lisse.

(1) Nota del Editor: Antes de ser contratada por CALYPSO URANIUM en octubre de 2007, Larissa Pergat se desempeñó como Consejero Comercial y Económico de la Embajada de Canadá en Buenos Aires. Me pregunto: ¿La embajada canadiense está detrás de esta movida que promociona una actividad prohibida en la provincia de Mendoza? ¿Acaso la embajada canadiense opera para dar vuelta la ley 7722 del año 2006 que prohíbe la minería metalífera a cielo abierto en toda la provincia? Por Luis Clips