Entregó a una empresa afín a la Junta de Andalucía, según la investigación. A Grupo México se le complican las cosas en España. Según publica el diario El Mundo, el grupo que preside Germán Larrea Mota podría haber pagado comisiones a la empresa andaluza Magtel por 20.9 millones de pesos para que mediara a su favor en el concurso de la mina de Aznalcóllar.

 

Fuente: Economía Hoy

En concreto, Grupo México habría pagado 1.2 millones de euros (20.98 millones de pesos) a Magtel, investigado por tráfico de influencias con la Junta de Andalucía, por “sus servicios en el concurso de adjudicación de la mina de Aználcollar” que le fue adjudicada por la Junta de Andalucía, proceso que posteriormente se paralizó por las sospechas de amaño. Así, y según consta en la documentación en manos del juzgado de instrucción número tres de Sevilla recogida por el diario El Mundo, el gobierno que preside Susana Díaz otorgó el contrato de explotación y reapertura de la mina a la firma andaluza, que estaba asociada con la multinacional mexicana, sin “el más mínimo rigor” y con “muchas irregularidades”. El trato de favor que presuntamente le dio el Gobierno andaluz a Magtel sería en realidad una intermediación a favor de Grupo México por el que la compañía minera habría pagado, recoge el diario español citando fuentes del juzgado.

Y es que, entre los documentos que la dirección general de Industria Energía y Minas de la Junta ha enviado al juzgado se encuentra una factura emitida por Minobris (la filial creada por Magtel para acudir al concurso de la mina) a AMC Mining Iberia, la filial del Grupo México, por poco más de 1.2 millones de euros. En el concepto de la factura publicada por El Mundo, la empresa sevillana apunta ese monto como “honorarios por servicios de coordinación previa” a AMC Mining Iberia “para el desarrollo e impulso del proyecto de explotación de la reserva minera Aznalcóllar”

Según apuntan fuentes de la investigación citadas por el diario, la factura parece ser una comisión por las gestiones realizadas por Magtel ante la Junta, con la que tenía una relación privilegiada, para ganar el concurso de la mina. Así, la investigación apunta a que e grupo empresarial con sede en Córdoba pudo valerse de sus conexiones con el gobierno de la Junta de Andalucía para lograr la mina, un presunto caso de tráfico de influencias.

Grupo México ha negado en todo momento que haya “irregularidades” en la adjudicación de la mina de Aznalcóllar y en un comunicado a la bolsa de valores mexicana negó que le hubieran retirado el contrato, tal y como aseguró Susana Díaz. Con este nuevo paso en la investigación abierta en España, al grupo minero se complica su plan de expansión internacional y se suma a los problemas que afronta en Perú, donde ha suspendido temporalmente el proyecto de la mina Tía María ante las constantes protestas de la población que acusa al Gobierno de Perú de llevar a cabo un plan que contaminará sus tierras.