El gobierno de Brasil presentó el martes un esperado proyecto para reformar su código minero de casi medio siglo que duplica las regalías hasta un 4 por ciento. El impacto de la propuesta sería menos de lo que la industria minera temió cuando comenzaron las discusiones sobre la reforma hace casi cuatro años. La tasa principal sería apenas una tercera parte de las regalías cobradas, por ejemplo, en Australia.
Fuente: Reuters
Murilo Ferreira, presidente ejecutivo de la brasileña Vale SA, el principal exportador de mineral de hierro del mundo, dijo que el proyecto golpearía duro a las mineras. Según sus cálculos, los ingresos del Gobierno por concepto de regalías subirían a 4.200 millones de reales (1.930 millones de dólares) desde 1.700 millones de reales actuales.

Y sin embargo, el impacto de la propuesta sería menos de lo que la industria minera temió cuando comenzaron las discusiones sobre la reforma hace casi cuatro años. La tasa principal sería apenas una tercera parte de las regalías cobradas, por ejemplo, en Australia.

Brasil se dispone a introducir las reformas en momentos en que la industria minera se desacelera fuertemente. En el 2009, cuando la el proyecto fue propuesto, la industria vivía uno de sus momentos de mayor prosperidad.

Las acciones preferenciales de Vale, los títulos más negociados de la compañía, subieron un 1,8 por ciento a primera hora de la tarde del martes en la bolsa de Sao Paulo.

La propuesta pondrá a prueba los esfuerzos del Gobierno de la presidenta Dilma Rousseff por reducir las tensiones con los inversores, muchos de los cuales perciben las políticas económicas de Rousseff como erráticas e intervencionistas.

En un anuncio televisado, la presidenta dijo que su Gobierno quiere que las compañías mineras tengan estabilidad contractual y seguridad. Aseguró además que pretende que las concesiones estén condicionadas a cumplir las metas de inversión y ambientales.

El proyecto prevé aumentar las regalías hasta un 4 por ciento calculadas en base a ingresos brutos generados por los proyectos mineros menos impuestos. Bajo el proyecto, el Gobierno tiene el derecho de realizar excepciones en las regalías, captando menores tasas dependiendo del caso.

Una vez que se convierta en ley, el Gobierno fijará por decreto la tasa de cada proyecto dependiendo del tipo de mineral y la ubicación geográfica, dijo el Ministerio de Minas y Energía. Cada decreto podrá luego ser revisado por el Congreso.

Actualmente las regalías son determinadas sobre la base de los ingresos netos. El cambio pondría más presión sobre firmas mineras como Vale, que ya no podrán deducir sus costos de transporte.

Esos costos son particularmente significativos, porque los competidores de Vale como las australianas BHP Billiton Ltd y Rio Tinto Ltd. están más cerca de China, el principal mercado global del mineral de hierro y otros metales.

Además de mineral de hierro, Brasil es además un importante productor de cobre, oro, bauxita, níquel y manganeso.

La propuesta prevé la creación de una agencia regulatoria, reglas que exigen a los detentores de derechos de exploración desarrollar sus concesiones a riesgo de perderlos y un sistema de licitaciones de algunos derechos mineros por un plazo de 40 años, renovable por otros 20.

El Congreso seguramente debatirá el proyecto y lo votará hacia fin de año, dijo el ministro de Minas y Energía, Edison Lobão. Y Brasil comenzará a aplicar estrictamente la ley sobre los contratos mineros actuales, pasando la página de la anterior tolerancia.

La propuesta mantiene la división de las regalías entre el gobierno federal y los gobiernos locales, con un 65 por ciento para los municipios afectados por la minería, un 23 por ciento para los estados productores y un 12 por ciento para el gobierno federal.

(dólar = 2,17 reales)