A tres semanas del derrame de hidrocarburos del buque Cabo San Sebastián de Alpesca, no se brindaron precisiones sobre el nivel de contaminación producido. El Ministro de Ambiente se negó a ir al Concejo Deliberante de Madryn a dar explicaciones. Podría ser interpelado en la Cámara de Diputados.

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Por Nelson Saldivia publicado en Revista Puerto

El ministro de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable de Chubut, José María Musmeci, rechazó la convocatoria realizada por el Concejo Deliberante de Puerto Madryn para dar explicaciones sobre el evento, acaecido el 17 de agosto pasado, cuando un barco de la flota fresquera de altura de Alpesca, actualmente bajo la custodia del Estado Provincial, en su condición de varadura escoró a estribor liberando al mar una cantidad no determinada de hidrocarburos y sentina.

A 21 días del episodio siguen sin conocerse datos técnicos precisos sobre los niveles de contaminación que provocó ese derramamiento, al tiempo que pescadores rederos de costa han manifestado en medios locales haber detectado manchas de hidrocarburos varias millas al norte de donde se produjo el evento, aunque tampoco se dio a conocer desde la cartera de ambiente si los muestreos realizados se limitaron exclusivamente al lugar del siniestro propiamente dicho, o si se realizó un monitoreo más amplio.

La reticencia en aportar datos de nivel técnico no hace más que generar dudas sobre los efectos reales que ha provocado la varadura primero, y la escora con liberación de combustible después, en la zona del muelle Almirante Storni de Puerto Madryn.

Musmeci no irá a explicar nada al Concejo Deliberante, aunque podría ser citado en las próximas semanas por la Cámara de Diputados de Chubut, donde además tiene otra interpelación pendiente por el derrame de alúmina al mar de parte de un barco que abastecía a la planta de Aluar.

La negativa del funcionario del gobierno de Martín Buzzi fue criticada por la concejal Marcela Curache al cuestionar el accionar del Ejecutivo Provincial en todo el proceso vinculado con Alpesca, desde su intervención hasta la varadura de su flota. “Destruyeron la pesca y ahora vienen por la destrucción de los recursos naturales y el turismo”, reprochó en la última sesión.

La edil madrynense puso especial énfasis en la poca voluntad de los funcionarios para esclarecer la situación al tiempo de advertir que sigue habiendo peligro de algún derrame porque los barcos no han sido vaciados por completo, tal como lo admite el propio Musmeci en la carta donde les avisó que no iría a responder preguntas al Concejo. “Cualquier marejada o marea extraordinaria puede provocar que los buques se vuelquen. Hay que hacer una evacuación inmediata de todos esos buques”, planteó Curache al tiempo de insistir en que “desde el Ministerio de Ambiente y Control de Desarrollo Sustentable tampoco informaron cuáles son los resultados de las muestras, analizadas por técnica de gravimetría, cromatografía de gases y espectrometría de masas”.

“Esto realmente ya no nos sorprende, pero esperábamos que el Ministro hiciera una excepción y aceptara la invitación para poder sacarnos las dudas. Realmente estamos muy preocupados no sólo por las consecuencias que relativas al derrame de hidrocarburos tras el hundimiento del Cabo San Sebastián, sino también pues entendemos que las condiciones del Cabo Buena Esperanza, Cabo Dos Bahías, Promarsa I y II son de emergencia”, describió la concejal al volver a advertir que aún sigue existiendo riesgo para el medio ambiente hasta tanto no se saque a la flota de su estado de varadura en la costa al sur del muelle Storni.

“La situación de los barcos Cabo Buena Esperanza, Cabo Dos Bahías y Promarsa I y II siguen siendo realmente preocupante. No sólo para el daño ambiental sino a la hora de pensar en reactivar las tareas de producción pesquera. Actualmente, no se conocen, o por lo menos el Ministerio de Ambiente no lo ha informado, cuáles son las tareas específicas para evitar nuevos desastres”, indicó Curache quien agregó: “Sabemos que cuando sube la marea, los barcos, especialmente el Cabo Buena Esperanza, sigue afectado por la misma, provocando un peligroso movimiento de los líquidos que contiene. Con respecto al Promarsa I, si bien está amarrado en el muelle, no sabemos cuál es su estado de situación porque no ha sido inspeccionado. No sabemos ni siquiera cuál es el estado de sus cabos” de amarre.

En este sentido, Curache hizo hincapié en que desde el Ministerio de Ambiente reconocieron que “al momento de la inspección se desconoce el estado de los tanques de combustible de los buques mencionados”.

“Le decimos al ministro Musmeci, quien seguramente no viene al Concejo Deliberante porque está sumergido en el mar limpiando el derrame de hidrocarburos, que es urgente que todos los buques sean adrizados. Además, tienen que achicar todo lo relativo a combustible, aguas contaminadas, líquidos de sentina que incluyen restos de entre 20 y 30 químicos que se utilizan en la sala de máquinas. Hay que evacuar del buque todos aquellos productos químicos que se usan en sala de máquinas como productos para el pescado. También se deben retirar de los buques todos los líquidos refrigerantes. Se deben retirar los restos de pinturas epóxicas, solventes, disolventes, destapantes, fosfatizantes”, recomendó.

Con todo, la orfandad de información técnica, primero sobre el perímetro de contaminación, y los volúmenes y densidad de los líquidos contaminantes, no contribuye a generar condiciones de seguridad y confianza sobre la calidad ambiental del Golfo Nuevo.